Todo cambiará en el momento en el que ella se de cuenta que no recuerda los detalles de su vida. Encontrará nuevos amigos y también el amor... Pero, encontrarse a sí misma será lo más difícil. ¿Quién la ayudará? ¿Un hombre fuerte e independiente o u...
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CAPÍTULO 10
"Hogar Dulce Hogar"
AMBER
Ese mismo día...
Habían pasado varias horas desde que Gianluca y Bruno regresaron, estaban agotados y decepcionados ya que me habían dado las malas noticias a mí.
Nadie me echaba de menos...
Es que me resultaba tan difícil de comprender y la angustia volvió a aparecer nuevamente.
¿Nadie había preguntado por mí?
¿Nadie denunció mi desaparición?
Las palabras de Gianluca resonaron en mi cabeza:
Prometo volver a llamar.
Y también las de Bruno:
Lo siento tanto Amber, pero te prometo que haré lo imposible para encontrar a tus conocidos. Lamento no poder haber hecho nada más.
Después recordé la discusión de los chicos, porque Gian decía que podían hacer hecho más.
—¿Qué más podíamos haber hecho, Gianluca? ¿Gritarle a la policía? —le preguntó Bruno todo rojo al chico de pelo castaño.
No me sirve de nada que me hagan promesas, no me sirve de nada que ellos estuvieran a mí lado si los dos estaban distanciados.
—Chicos —los llamé y capté su atención —No sirve de nada pelear por algo que no se puede cambiar.
Los dos se calmaron y un silencio se presentó en toda la sala, miré a Nadia y ella estaba parada al lado del sofá refregándose la frente.
Luego de unos segundos, Bruno rompió el silencio:
—Tenes razón... Simplemente lo intentaremos de nuevo.
Solo asentí con la cabeza y exhalé suavemente.
—Si eso quieren, voy a ir con ustedes la próxima vez.
El pelinegro asintió levemente, —Por supuesto.
Gianluca se acercó a mí y una vez parado frente a mí levantó su mano y suavemente acarició mi mejilla.
—No nos rendiremos hasta encontrar la verdad.
Le dí una sonrisa de boca cerrada y ví en sus ojos todo rastro de cariño y amor, esta es la primera vez que estoy completamente segura de lo que la mirada del chico dice.
—Yo solo quiero saber quien dejó esa nota.
Los tres volteamos hacia Nadia que estaba todavía en el mismo lugar y volvió a hablar después de un largo tiempo.
—Se lo voy a informar a la policía.
Al fin al parecer todo esto estaba pasando gracias a la misteriosa persona que había escrito esa nota.
