Todo cambiará en el momento en el que ella se de cuenta que no recuerda los detalles de su vida. Encontrará nuevos amigos y también el amor... Pero, encontrarse a sí misma será lo más difícil. ¿Quién la ayudará? ¿Un hombre fuerte e independiente o u...
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CAPÍTULO 25
"No estoy sola"
Unas horas después...
Había pasado bastante tiempo desde la última vez que Gianluca, Bruno, Nilsson y yo estuvimos juntos en el mismo lugar. Y de esa forma te das cuenta en que en las malas realmente se conocen a los amigos, cada uno de nosotros continúo con su vida, pero todavía estaban ahí para mí.
Eso me dio fuerza y esperanza para una vida mejor, porque... no estaba sola.
Los vi entrar al bar con la mirada irritada, Bruno con su semblante llamativo e inteligente y Nilsson con su belleza intacta y atractiva.
—¡Están acá! Respondieron mi llamado en medio de la noche.
Las palabras de Nadia hicieron que una sonrisa apareciera en mi rostro inconscientemente.
—Supongo que quieren llevar al culpable ante la justicia, igual que nosotros.
—Vamos —ordenó mi chico —, tenemos que ponerlos al día de todo esto.
Elegimos una mesa al final del bar para que pudiéramos tener más privacidad, le mostramos los vídeos después de contarles todo y le dimos nuestra teoría.
—Ahora que tenemos algún tipo de evidencia en nuestras manos, necesito saber algo... —les dije mirando a ambos chicos —¿Puedo confiar en ustedes? ¿Van a seguir ayudándome?
Bruno levantó las cejas con un aire de obviedad.
—Por supuesto que sí, Amber.
Nilsson me nos dió una sonrisa de boca cerrada, muy típica de él.
—Estaré ahí para todo lo que necesites.
Los ojos de Nils se fijaron sobre los míos y supe que estaba hablando con toda sinceridad cuando pestañeó lentamente.
—Necesitamos que guarden estos vídeos en varios lugares con toda seguridad, porque planeamos usarlos para chantajear a Lila —Nadia habló luego de aclararse la garganta.
—Sí, por ahora solo están en mi teléfono, pero no es exactamente la forma más segura para tener algo tan importante —agregué, seria —Además los vídeos tienen que permanecer en secreto.
—Hecho —dijo Nilsson.
—¿Hay algo más que debamos saber o hacer por vos, Amber? —preguntó Bruno.
—Por el momento, solo necesito de su disposición, muchas gracias.
—¿Segura de qué no necesitas más ayuda en otra cosa?
Estaba a punto de responderle a Nilsson, pero Gianluca se adelantó y habló cortante.
—Amber no estará sola, la tiene a mi hermana y sobre todo me tiene a mí.
