El niñero

Capítulo 58

-¿En el hospital?- preguntó algo impresionado.

-Si- apenas pude responder por el sentimiento de mi llanto. -Necesito que vengas, el auto de Carlos no funciona y tenemos que ir ahora mismo al hospital-

-Dame la dirección- me dijo y le cedí el celular a Carlos, este le indico donde era y en menos de cinco minutos ya estaba en la puerta.

Rápido salimos todos y subimos al auto, afortunadamente mis lágrimas se habían mezclado con las gotas de lluvia.

-Vamos a mi casa primero- le dije y le di un intento de sonrisa. Sin preguntar nada acató mi orden y condujo hacia mi casa.

Rápidamente bajamos Esthefani y yo.

-¿Mamá?- grité cuando entré y salió de la cocina.

-¿Que sucede?- preguntó al vernos.

-Esthefani por que no subes y buscas a Caro- le sonreí, asintió con la cabeza y subió las escaleras.

-Michael tuvo un accidente- le susurré. -Esta en el hospital y sus hermanos están en el auto junto con River, vamos para el hospital- de nuevo las lágrimas se acercaban. ¿Desde cuándo me había vuelto así?. -Ella no debe de saber nada, no aun- me refería a Esthefani.

Sorprendida asintió con la cabeza.

-Cualquier cosa que pase o necesiten me llamas- me abrazó. -Vas a ver que mi yerno va a estar bien- me soltó y me di la vuelta para correr a la puerta pero me detuve y volteé a verla. -¿Había dicho 'yerno'?- pero que forma tan mas sútil de decirme que ya sabía sobre lo mío con Michael. La miré sorprendida. -Caro- me respondió, negué con la cabeza y ahora si salí corriendo.

Caro no había cumplido lo que le había prometido a Michael, pensé en cuanto subí al auto. Había perdido su helado.

Llegamos al hospital, todos bajamos y entramos buscando por todas partes a Elisa y Cristián

-¡Haber tranquilos todos!- River detuvo la paranoia de los tres, solo lo miramos atentos, Caminó hacia el escritorio donde estaba una mujer, que por su vestimenta nos indicaba que era enfermera, además de que había un gran letrero con letras rojas que decía 'Urgencias'

Regresó y nos informó.

-Sigue en urgencias, tenemos que esperar ahí- señalo hacia la pequeña sala de espera donde efectivamente estaban Cristian y Elisa.

-Una camioneta se pasó en rojo, iba a alta velocidad y no pudo detenerse y embistió el auto de Mike provocando que se volteara- nos explicó Cristián.

River me envolvió en sus brazos, acción que me reconfortaba, no del todo pero ayudaba.

Eran cerca de las diez de la noche y aun no sabíamos nada, los doctores y enfermeras que entraban y salían solo se limitaban a decirnos 'Nosotros les informaremos' esto me estaba matando.

-Chicos tenemos que irnos, si no Esthefani se preocupara- nos dijo Elisa, tenía razón. La pequeña comenzaría a preguntar. -Cualquier cosa nos llaman inmediatamente- nos dijo a los cuatro. En contra de su voluntad salieron del hospital.

-Iré a la cafetería quiero un café- se puso de pie Carlos -¿Quieren algo?- nos pregunto y negué con la cabeza.

-¿Quieres que te internen ahora mismo por principios de anemia?- me preguntó seriamente River, negué con la cabeza -Entonces bajas ahora mismo y comes algo- me ordenó. No quería hacerlo. Si tenía hambre pero quería saber de Michael, tenía que asegurarme de que está bien. -Ve con ellos- me indicó. -Yo aquí espero y si me dicen algo les aviso- no muy feliz obedecí.

Llegamos a la cafetería y nos sentamos en una mesa, Carlos ordeno tres cafés y tres sándwiches ya que la verdad nadie tenía humor de comer.

Comimos en silencio, yo apenas y terminé la mitad del sándwich.

-No te irás de aquí hasta que te lo termines- me indicó Carlos como si le hablara a una niña pequeña, lo fulminé con la mirada. -Hasta que termine- le indico a Liam para después salir de la cafetería.

Permanecimos en silencio por unos momentos hasta que él lo rompió.

-Anoche me dijiste que hablarías conmigo- me recordó. Era increíble su hermano estaba en urgencias y él quería 'aprovecharse' de la situación.

-Sabes Liam no creo que ...- empeze hablar.

-Quería disculparme- me interrumpió.

-¿Eh?- dije bastante sorprendida.

-Ayer, quería disculparme- repitió tratando de no reír, seguro mi rostro demostraba lo extrañada que estaba.

-¿Por?- pregunte.

-Por actuar como un idiota- miró hacia abajo. -Normalmente actuar como un idiota funciona, pero esta vez no- no pude evitar reír. -Además se nota que lo tuyo con Mike es algo fuerte-

-Si, yo creo que ...- ¿pero qué rayos había dicho?.

-¡Ha! ¡Lo sabía!- soltó una carcajada.

-¿Que sa-sabías?- pregunté nerviosa.

-Ya me lo imaginaba- me contó. -Nunca paraba de hablar de ti y después Michael en depresión toda una semana, sin hablar de ti y el día que llegas a la casa 'ósea anoche' no quita la sonrisa- ¿Pero qué?. Ahora resulta que ¡todo mundo sabía!.

-¿Y entonces por qué me seguías tratando así?- pregunté -Incluso anoche, no parecía que querías disculparte-

-¡Aun esperaba que alguien me lo dijera!- sonrió. -Además, es divertido hacer enojar a Michael- se puso de pie. -¿Vamos ya?- me preguntó y asentí con la cabeza.

Fui a la caja y pedí dos cafés más, uno para mí y uno para River. Liam no me dejo pagar. Sin dudas era un buen chico pero como el mismo había dicho 'Normalmente funciona actuar como un idiota'

-Ana, será mejor que te vayas a casa a descansar- me dijo Carlos. -Si hay noticias te llamamos- si estaba cansada mas no me iría sin tener noticias de Michael.

-No Carlos, aquí me quedo yo hasta que él salga- le dije firmemente, no quería que insistiera o me molestaría.

Miré el reloj en la muñeca de River quien dormía incómodamente en una de las sillas al igual que Liam, las dos de la madrugada, y aun sin noticias. Todos los enfermeros nos evadían y eso me ponía aun peor.

-Familiares de ...- el doctor miro la tabla en la que traía algunas hojas blancas. -Michael Miller- de inmediato Carlos y yo nos pusimos de pie, moví a River y a Liam para que despertaran y aun adormilados se pararon fugazmente.

-Nosotros- casi caemos todos al querer acercarnos al médico. Todos reímos tontamente y en segundos nuestro rostró volvió a ser serio con una mezcla de preocupación. Y finalmente el doctor habló.

-Lo siento tanto- empezó a hablar ...