makeup [Emiliaco]

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–-¡Me siento más gay que nunca!

Exclamó Emilio y soltó una pequeña risa de felicidad. Su novio, que estaba encima de él y con su barbilla recargada en su pecho, lo miró con ternura y sonrió con ganas.

–-¿Por qué, mi amor? —preguntó Joaquín y se enderezó para luego sentarse a lado de Emilio, siendo imitado por él, quien se sentó de igual forma.

—Ya estamos a junio, Joaco. Se siente ya el ambiente... ya sabes —habló y sonrió aún más, —el aire ya huele a libertad, a amor, a ganas de salir y gritarle a todo el mundo que me encantan los hombres. Que me encantas tú, que te amo y-

—Basta, Emilio, no empieces de cursi porque ya sabes cómo me pongo de sensible —se quejó con ternura Joaquín y llevó su mano a una de las mejillas del mayor, tomándola como suavidad. —Te amo y estoy muy orgulloso de ti, mi amor.

Orgulloso. Joaquín estaba orgulloso de él.

—Gracias, Joaquín —susurró el rizado y pasó saliva. —Gracias, a veces realmente hace muy bien que te digan eso. Yo también estoy muy orgulloso de ti, ¿escuchas? mucho, demasiado. Te amo.

¡Se amaban tan malditamente tanto!

Ambos acercaron sus rostros y sus labios se tocaron con delicadeza, moviéndose despacio y con calma, disfrutándose.

—Estaba viendo algunas imágenes en Pinterest... —comenzó a contar Joaquín cuando se separaron y carraspeó, —quería subir algo a mi Instagram, un maquillaje.

Emilio asintió atento y miró rápidamente su regazo, pidiéndole sin palabras a su novio que sentara en él. Joaquín, por supuesto, no tardó en entender y se levantó para obedecer, acomodándose en las piernas del mayor y llevando ambas manos a sus hombros para sostenerse, de inmediato sintió unas manos en su cintura y fue ahí cuando se sintió completamente seguro y protegido.

—Okay, amor.

—Y- bueno, es un maquillaje un poquito más, ¿artístico? creo que es la palabra. Ya he subido algunas fotos con maquillaje, pero casi no se nota, esta vez quiero algo completamente diferente. ¿Quieres ver? —preguntó y sin dudarlo Emilio asintió con emoción.

—Muéstrame, amor.

Joaquín buscó su celular con la mirada y estiró su mano hasta tomarlo cuando lo halló, lo desbloqueó y enseguida fue hacia Pinterest, en dónde tenía muchas ideas de maquillajes que planeaba hacerse.

—Mira —le mostró la pantalla a su novio y éste le dedicó una bonita sonrisa, imaginando de inmediato a Joaquín con ese maquillaje en su cara. —Obviamente no voy a salir a la calle así, pero me gustó mucho para alguna sesión de fotos o no sé, aparte la frase que dice. ¿Qué opinas? Le puedo decir a Azul que nos preste su cámara y hacemos unas fotos bien bonitas.

Emilio subió de nuevo su mirada para admirar a su novio y lamió sus labios.

—Joaco —susurró y Joaquín lo miró atento. —Literalmente estoy imaginándote y- es que amor, eres tan precioso, todo tú... tu carita, tus ojos, todo tú eres tan bonito y estoy seguro que eso te va a salir divino como todo lo que haces, mh. Si quieres te puedo ayudar a... no sé, a verte.

Joaquín rió con ternura y sus mejillas se sonrojaron con intensidad.

—¿De qué me serviría que sólo me vieras, amor?

—¿De qué? —preguntó incrédulo y apretó su agarre en la cintura del menor —Mis ojos pueden ser como un espejo, Joaco. Y no porque te reflejes en ellos, sino porque te voy a mirar con tanto amor que podrás notar lo bonito que estás viéndote. Porque conforme vayas pasando aquellas brochas llenas de colores por tu cara, mi mirada va a llenarse cada vez más de admiración. Y podrás ver lo mucho que me siento orgulloso de ti.