makeup [Emiliaco]

23

–-Wey, no.

–-Wey, sí.

—Wey, ¿neta lo vas a hacer? —preguntó Romina.

—Sí, lo haré.

—Umh, nop, no lo harás.

Emilio la miró cansado y detuvo sus pasos.

—Voy a comprar eso —dijo firmemente.

La chica suspiró.

—Emilio, mil doscientos pesos —dijo lentamente —¿sabes qué puedes comprar con todo ese dinero? un chingo de cosas.

—Romi, Joaquín quiere esa paleta, y yo-

—Joaquín no quiere que gastes tanto en él, y lo sabes, wey —reclamó —Él te dijo que pueden ver otras marcas más económicas, ¿te dijo o no te dijo?

Emilio suspiró y parpadeó lentamente —Sí, eso me dijo.

—¿Lo ves?

—Romina, si le compro esa paleta Joaquín va a ser el más feliz, y yo quiero verlo feliz.

—¿Cómo sabes que se va a poner feliz y no se va a enojar?

Emilio frunció el ceño —¿Por qué se enojaría?

—¡Porque no quiere que gastes tanto en él, Emilio, entiende!

Romina estaba cansándose en serio.

Y Emilio que calló, pensando.

Quizá su hermana tenía razón, pero... ¡realmente quería esa paleta para su novio! quería comprarla, pero claro que conocía a Joaquín, aunque lo negara sabía que Romi tenía toda la razón, su pequeño le repetía una y otra vez que él no necesitaba regalos caros y que no le gustaba que gastara tanto en él. Pero Emilio lo vio, vio aquel brillo de emoción en sus ojos cuando miró aquella paleta de maquillaje, Joaquín la quería y el rizado sólo quería verlo feliz.

—Wey, mira —le habló su hermana y la miró ya más calmado —¿por qué no mejor le compras una paleta más pequeña con colores neutros, como rosas o naranjas, y luego entre los dos compran la de James Charles? —preguntó y continuó —están más baratas y están muy lindas, con esos colores Joaquín puede ir empezando poco a poco, no se ven tanto y son muy lindas, yo sé lo que te digo, Emilio.

Okay, realmente lo convenció.

—Pues vamos, entonces —habló y caminó hacia la entrada de Liverpool, siendo detenido por su hermana.

—¿A dónde vas, wey?

El rizado señaló obvio —Pues a comprar la bendita paleta, wey.

Romina rodó los ojos y lo jaló del brazo, alejándolo de las puertas de la enorme tienda.

—Obviamente aquí no, tonto, lo que buscamos es algo económico.

Así que Emilio se dejó llevar y cuando menos lo pensó ya estaban en una tienda especialmente de cosméticos. Entraron y los ojos del rizado recorrieron los tantos estantes y las vitrinas llenas de maquillaje, realmente le sorprendió ver tantos productos, ¿para qué servía tanta cosa?

Se detuvo cuando miró una paleta casi idéntica a la que quería comprar antes, abrió más los ojos y se acercó.

—¡Wey, mira! Es como la de Juan Charlie.

Romina frunció el ceño y lo miró.

—¿Juan Char...?

Se interrumpió cuando miró la paleta que señalaba Emilio. James Charles, eres de James Charles. Rodó los ojos y lo ignoró, mirando las demás paletas y buscando una que le gustara para Joaquín.

Después de unos cuantos minutos, tanto Emilio como Romina ya estaban frente a la chica que los atendía, les mostraba un par de paletas de nueve sombras satinadas o metálicas y otras mates.

—En lo personal estas dos son mis favoritas —habló la chica que los atendía —los colores son muy bonitos y pueden combinar muy bien. Te las recomiendo mucho, también la calidad es muy buena.

El rizado entrecerró sus ojos y miró ambas paletas.

—Esta es Strawberry shake y esta es Baby got peach —siguió hablando la chica, señalando cada paleta y abriéndola para mostrarles las sombras.

Emilio quedó enamorado de la imagen de Joaquín en su mente, aplicando con una brocha aquel maquillaje rosado y durazno en sus párpados, siendo tan delicado y mirándose al espejo, dándose cuenta que le quedaba precioso. Se lo imaginaba tan bien. ¿Qué tal si le dejaba que él lo maquillara? Lo haría con todo el cuidado y suavidad del mundo.

Sonrió y comenzó a asentir con su cabeza.

—Esta, quiero esta —dijo y señaló la paleta de Baby got peach —definitivamente Joaquín se verá hermoso con estos colores, estoy seguro, la quiero.

Romina sonrió son ternura, ¡su hermano amaba demasiado a Joaquín! no tenía ninguna duda, ambos eran tan bonitos juntos.

La chica que frente a ellos también sonrió discretamente, viendo lo emocionado que se encontraba el rizado.

—¿Entonces será está, cierto? —preguntó ésta y Emilio asintió rápidamente —Bien, ¿será algo más?

—Umh —pensó el rizado y entrecerró sus ojos —¡Brochas! —exclamó abriendo más los ojos —obviamente brochas, ¿sino cómo se va a poner las sombras? También vi que se ponían algo antes de maquillarse, pero no me acuerdo cómo se llamaba, era algo como... umh —chasqueó sus dedos, tratando de recordar el nombre de aquel producto —mierda, no me acuerdo. Era... ¡puta madre, Romina, ayúdame!

Ella rodó los ojos y miró a la empleada.

—Un primer.

—¡Eso! —dijo Emilio, señalándola —¡Era eso, el primer! Es para que le dure más el maquillaje, ¿cierto?

—Sí, sirve para eso, te prepara la piel antes de la base  —mencionó simpáticamente la chica frente a ellos —Serán entonces brochas y el primer, ¿verdad?

—Y la paleta, obviamente. ¡Oh! —exclamó de repente, recordando —¡también un corrector! es para que pinten más la sombras, Rosy McMichael lo dijo en uno de sus vídeos.

Así que se agregó un corrector a la lista.

Después de unos largos minutos en los cuales Emilio no se decidía si comprar las brochas blancas o las plateadas, terminó escogiendo unas rosadas pastel, se veían muy suaves y delicadas, justo como Joaquín, así que no lo pensó mucho cuando tomó el pequeño paquete transparente en donde venían.

Romina ya tenía el primer y el corrector y ahora la empleada estaba cobrándoles. No fue poco, pero definitivamente fue mucho menos que mil doscientos pesos, así que Emilio quedó satisfecho.

No podía esperar a llegar a la casa de su pequeño y mostrarle lo que le había comprado. Estaba muy emocionado y feliz, demasiado.

Ya quería ver la sonrisa tan bonita de Joaquín cuando viera la paleta y las brochas y... ¡hasta le compró el primer!

Haría lo que fuera por él, lo que sea.

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por si no están muy familiarizados la palabra primer se pronuncia "praimer" y pues se pone para preparar la piel antes de la base, creánme que sí es muy importante, al menos a mí me sirve muchísimo

(edit** al parecer el primer no es tan necesario a, según dicen es más importante hidratar la piel y poner protector solar que el primer, entonces ya saben okas)

sé que en este capítulo no hubo nada de emiliaco pero me gustó mucho porque en serio Emilio ama un montón a Joaquín y me pareció muy tierno todo ok el próximo capítulo ya estará mas bonito, se los prometo

lxs quiero mucho