Decisiones de Hermanos

Un Jin solo

Este capítulo sirve más de contexto que otra cosa, y pasó antes del capítulo "Un momento de paz" supongamos sea un recuerdo.

Espero no sea confuso 😅

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Jin Zixuan no había estado presente en la junta de Torre Koi, por muchos motivos, pero uno de ellos era su madre, que lo había mandado a un encargo, eran cosas que hacía regularmente, ya que ella se quería encargar de manera personal de que todo en su compromiso saliera bien está vez.

También el Jin aprovechaba estás salidas para buscar algún bonito presente para la líder Jiang, había escuchado consejos de su madre, pero cuando le dio una cosa realmente costosa a Yanli, pudo observar su expresión complicada, muy distinta a la suave sonrisa que le regaló aquella vez de los lotos.

Después de eso se dio cuenta que la nueva prometida de su medio hermano, la doncella Qin Su se había entendido bien con la doncella Jiang, así que tuvo la brillante idea de pedirle consejo a esta para poder buscar regalos más adecuados a los gustos de su prometida.

Ahora se encontraba de regreso a Torre Koi con el encargo de su madre, sus 5 discípulos que lo acompañaban y la sencilla pero bonita peineta de colores morado y rosa que había encontrado en el lugar.

Lo que no esperó al llegar fue como las sectas invitadas y su padre junto a su medio hermano seguían discutiendo cosas relacionadas a su futuro cuñado Wei Wuxian, pero los Jiang y el segundo maestro Lan ya no se encontraban por ningún lado, ya que no tenía el contexto de todo se dirigió en busca de su madre para anunciar su llegada, entregar las cosas y preguntar que pasaba.

Ella no pudo darle detalles y cuando se topó con Jin GuangYao esté le dio algunos detalles, pero sentía como nada tenía sentido, entendía que nadie quería a Wei Wuxian por su cultivo y también sabía, después de lo sucedido en la Montaña Baifeng, que los líderes Jiang lo estaban no solo defendiendo sino cuidándolo en Muelle de Loto, ¿para que querría Wei Wuxian a los Wen? Y ¿qué tenía que ver su primo en todo esto?

Partiría lo antes posible a Yunmeng para poder preguntar de manera directa que estaba pasando, y claro aprovechar para saber si A-Li estaba bien, darle su presente y ofrecer su hombro por cualquier cosa que necesitará, esta noche ya era tarde incluso si quisiera ir ahora mismo, debía esperar y pensar bien todo.

Así fue como llegó a Muelle de Loto un día temprano después de lo ocurrido, solo había llevado a dos escoltas con él, cuando llegó nadie lo recibió, era obvio nunca dio aviso de su llegada, se dirigió al campo de entrenamiento dónde sabía que A-Li se encontraría, pero grande fue su sorpresa al encontrar al Líder Jiang dando el entrenamiento y parecía más molesto de lo usual, como si impartiera un castigo, quizá había sido mala idea venir.

Ya estaba ahí así que solo se armó de valor y se acercó para saludar, disculparse por llegar sin aviso, pero no dio ni dos pasos cuando Zidian ya estaba extendida apuntándole y un Jiang Cheng enojado le gritaba.

— ¡¿Qué demonios hacen aquí?! ¡¿Qué quieren?! ¡Largo, no son bienvenidos! —rugía furioso, el Jin levantó ambas manos en señal de rendición, pero sus dos escoltas desenvainaron sus espadas para proteger a su joven amo, mala idea, esto solo puso más alerta al de morado y sus discípulos que obviamente les ganaban en número, creyó que un enfrentamiento sería inevitable hasta que la dulce voz que esperaba escuchar hablo.

— A-Cheng —Yanli lo reprendió sin siquiera alzar la voz, los discípulos reaccionaron a bajar sus armas y saludarla, aunque algunos otros se quedaron alerta por cualquier movimiento de los Jin.

Jiang Cheng solo frunció más el ceño y apretó a Zidian en su brazo no queriendo ceder, y realmente no tuvo que hacerlo ya que Yanli llegó a su lado a paso tranquilo y coloco su mano sobre la mano que sostenía el látigo, sin miedo a sentir algún choque, sabía que Jiang Cheng no dejaría que eso pasara, y así fue como Zidian volvió a su forma de anillo mientras su portador bufaba molesto por la intervención.