El cielo se oscurece con rapidez, corro a mi departamento sin importar que parezca una loca desesperada, así me siento. Subo las escaleras entre saltos y llego a mi pasillo, abro la puerta y tras estar del otro lado dejo que mi espalda choque contra la madera. Me deslizo hasta caer sentada y abrazo mis rodillas en posición fetal. Contengo las ganas de gritar para liberar esta sensación que está consumiendo mi cuerpo. Trato de controlar mi respiración, tengo los nervios a flor de piel.
—No asesiné a nadie. No asesiné a nadie. No asesiné a nadie.— repito con la cabeza gacha.
Levanto la vista, el espacio vuelve a ser tenebroso, algunas lágrimas encuentran camino por mis mejillas. Me seco con el dorso de la mano y medito en lo que puedo hacer para volver a tener el mando de la situación. Me toma unos minutos incorporarme e ir a la ducha, luego con ropa cómoda me acerco a la cama y cambio la funda con un profundo asco. Tiro la sábana en la bolsa donde guardé la ropa y me limito a desinfectar los alrededores. Busco debajo de la cama y saco la caja que he estado usando para reunir las evidencias que logré conseguir del hombre sombrío. La destapo con cuidado y despliego varias fotos impresas de las extrañas marcas que tenemos Emily y yo en el abdomen.
Luego la fotografía en la cual aparezco entrando a la sesión espiritista por segunda vez y que tiene escrito con rotulador rojo la palabra «Mía» junto con la otra captura de Dante y yo abrazados fuera de mi edificio. Miro la foto con tristeza por unos segundos y continúo con lo demás. Por consiguiente saco la tarjetita de la sesión y una grabadora que tiene inmortalizadas las palabras de Renay sobre este demonio acosador. Observo el conjunto de pruebas en la superficie blanca, no son suficientes para hacer que me crean pero es un buen inicio. Recuerdo que en mi bolso tengo la cámara así que decido vaciarlo, en el proceso caen recibos, clics, maquillaje, unas mentas y un papel doblado que me causa intriga.
—¿Qué?— mascullo detallando la carta.
Es la carta de recomendación que me hicieron en Designer.
«Liam despega la nota y me la otorga. Se la arrebato con molestia.
—Asegúrate de revisar los datos.— remarca la frase, sus ojos encuentran los míos por un milisegundos y un escalofrío involuntario me recorre.— Hasta pronto, fotografa de oro.»
Sin embargo, en un borde tiene un mensaje poco visible. Logro leerlo y una ola de confusión me desborda.
«Sé lo que quieres. Necesito tu ayuda.»
Frunzo el ceño y pienso que quizás sea una broma de mal gusto, una de las cosas que Liam suele llevar a cabo para molestarme. Caigo en cuenta de que su semblante ese día era distinto, casi forzado y dichos rasgos me empujan a ubicar mi móvil para llamarlo, por suerte su número sigue en mis contactos ya que siempre debía comunicarme con mi jefa a través de él. Los latidos retumban en mi pecho mientras el timbre de llamada pasa de los dos tonos. Espero impaciente. Él contesta al cuarto tono y la expectativa me inunda al oír su voz.
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Med: Acosador
Mystery / ThrillerCuando Med finalmente acepta ir con sus amigos a un club nocturno, no pensó que se convertiría en la presa de un acosador, una persona que promete destrozar su vida por completo. Ahora, una de sus mejores amigas ha sido atacada y Med no puede expli...