Mucho trabajo

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Mientras en la casa de un alfa con peculiares dientes, él y su amigo comían en silencio lo que había traído, en otro lugar un omega estresado iba de un lado al otro en la habitación de su hija.

Su amiga trataba de doblar y guardar toda la ropa que Izuku le iba pasando pero cuando lograba poner dos prendas el chico de rizos cambiaba de opinión y volvía a sacar todo.

_: Tal vez haga más frío en la noche, no te parece?

_: No creo pe- no pudo terminar de hablar.

_: No ya estamos más cerca del verano, y si llevan a Sayumi a nadar tengo que poner más toallas- corría al armario a buscarlas.

_: Deku-kun- no la estaba escuchando.

_: Y si comen helado y se manch,  no no no, tengo que poner más remeras pero la que tiene un arcoíris es su favorita y está sucia tengo que lavar la ropa.

_: IZUKU YA- lo sostuvo de los hombros y lo sacudió un poco- lo siento.

_: No, está bien lo necesitaba- el pobre hombre se sentó en la cama de su hija agobiado con todo y cubrio su rostro con algunas de las pequeñas prendas de vestir.

_: Deku-kun tranquilo, ella estará con sus abuelos un par de días no necesita tantas cosas- tomo la toalla que el pecoso aún tenía en una de sus manos.

_: Lo sé pero... nunca había estado sola sin nosotros, por más que sean sus abuelos aaaggh como le voy a decir lo que pasó- sus ojos volvían a llenarse de lágrimas.

_: Ya ya, te estás adelantando ocupémonos de una cosa a la vez si?- guardo una prenda de la pequeña en el bolso y justo en ese momento el timbre sonó.

_: Deben ser Masaru san y Mitsuki san- iba a levantarse para ir corriendo a abrir la puerta pero su amiga lo detuvo.

_: Tú termina de juntar las cosas Deku-kun yo iré a atenderlos.

_: Gracias.

Con eso último la castaña dejo a un muy triste peliverde juntando el resto de cosas que su hija necesitaría para los días que estaría en casa de sus abuelos.

Cómo Shinso se había llevado su auto de seguro estaría en la agencia, y aún que lo tuviera con lo nervioso que estaba no se atrevía a conducir.

Él no quisiera dar la noticia tan rápido a sus suegros pero no había otra opción, su madre no tenía auto y que ella viniera a buscar a Sayumi y se la llevará era demasiado trajín.

Además su suegro se había dado cuenta de que las cosas estaban mal entre su hijo y él la última vez que estuvo en la casa.

Se limpio un poco las lágrimas, como si eso hiciera una diferencia real en su rostro, tomo el pequeño bolso y un peluche de gatito con el cual su hija dormía y se dispuso a bajar.

Ni bien el omega puso un pie en la sala la mujer alfa que estaba presente corrió a abrazarlo y con lágrimas en los ojos le pedía perdón una y otra vez.

_: Izuku lo siento, lo siento, lo siento, no tengo escusas para lo que Katsuki hizo por favor perdóname- ella se sentía muy culpable por el comportamiento de su hijo.

_: Mitsuki san tranquila- se abrazo a la mujer- no es su culpa.

Era un momento de tristeza para todos, una familia se había roto y con una niña pequeña de por medio pero lo peor había sido la agresión de Bakugo a Izuku.

Cuando los dos empezaron a salir parecía que el alfa haría cualquier cosa por el pequeño omega y que este sea el final de su historia de amor no se sentía real.

The DalmoreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora