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La semana empezó y Bakugo sentía que llevaba una eternidad en la junta, si bien cada lunes era igual este día las horas pasaban más lentas para él.

Se sentía mal, no estaba tosiendo de milagro o más que milagro gracias al jarabe expectorante que compro y casi bebió todo escondido en el baño.

Haber abusado en las dosis de Clonazepam también ahora pasaba su factura, se sentía cansado, le costaba prestar atención.

Ni bien la reunión termino Bakugo fue al baño a fumar, sin importarle su tos, era lo único que lo mantenía algo tranquilo eso y beber en su oficina, así era como el alfa sacaba fuerzas para aguantar a la gente.

El día parecía que iba a terminar normal para él pero el llamado del jefe a último momento lo puso alerta.

Había estado esperando esto desde el fin de semana, el dueño de toda esa puta compañía, la que tanto anhelaba poseer y dirigir, los llamaría y seguramente lo felicitaría.

Cómo era de esperarse Dabi subió con él en el ascensor y se notaba en la cara nerviosa y cansada del pelinegro que lo había pasado mal en Okinawa.

_: Fin de semana difícil?- burló el rubio.

_: Ja para que decir que no- solo se encogió de hombros, no era para nada la reacción que Bakugo esperaba.

_: Sabes que te regañara verdad?- el alfa estaba algo curioso el beta a su lado no le estaba dando cabida a sus provocaciones y eso era raro.

Ambos hombres entraron y el jefe estaba hablando con algún socio, solo les hizo señas para que tomen asiento y en cuanto colgó su llamada miro a ambos subordinados muy serio.

_: Tengo dos hombres que solo fingen ser ambiciosos ante mí.

_: Que?- Bakugo estaba sorprendido, el venía a que lo feliciten no a esto.

_: Dabi tú inexperiencia casi nos cuesta mucho dinero y el trato.

_: Se equivoca- el rubio abrió en grande sus ojos, ese mocoso roñoso tenía el tupé de haber fallado e igual así decirle a su superior que estaba equivocado ¿Qué le pasaba?

_: Ja- el mayor dio un alarido más que una risa y acercó una botella de whisky, sirvió unos vasos y le dio uno a Bakugo- ilústranos muchacho.

_: Que ellos rechazaran nuestra participación en ese proceso de envíos no iba a ser motivo suficiente para perder todo lo que ya se construyo sobre los demás acuerdos en Okinawa.

_: De igual forma me pediste ayuda- ahora era Katsuki el que acusaba sin piedad al más joven-  las oportunidades no aparecen se crean.

_: Si y lo siento, pero era una buena suma y- no llego a terminar.

_: Tú no hables mucho Katsuki tal vez si hubieras tenido los informes para ese día y no para hoy el chico no haya pedido ayuda- Bakugo solo bajo la cabeza no pensaba decir nada.

_: El estaba con su hija- las palabras del ojiazul lo impresionaron.

_: Creo que les pago lo suficiente para que él pueda pagar una niñera ¿no Bakugo?

_: Mmm- la verdad que no quería decir nada.

_: Bueno- extendió un vaso al beta- está bien, que Katsuki haya pasado este fin de semana con su hija ya que no creo que la pueda ver en un tiempo.

_: Que?- ambos hombres hablaron al mismo tiempo uno más asombrado que el otro.

_: Si este problemita me hizo darme cuenta que ambos deben estar en Okinawa de lunes a viernes y bueno arreglen quien descansara que fin de semana.

The DalmoreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora