Krystal

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Se había salvado de seguir dando clases a Raina y estaba más que feliz. Exploraba por la internet.

Lo único que le preocupaba era el hecho que la chica cometa una estupidez como ella, la peor de todas, según la sociedad del país del que reside ahora.

Comprendía y se daba cuenta que lo que Raina sentía por Aron solo era un mero capricho y obsesión.

Si, obsesión.

Así como lo tuvo ella aquella vez hace dos años, con suerte no hubo muchas repercusiones hacia ella, porque de que hubo leves, mejor dicho, moderadas, lo hubo.

Suspiro y recordó cuando esas veces andaba loquita por un chico de su secundaria en E.E.U.U. es decir, perder la virginidad a la edad de quince años no es tan raro por allá, acá en Corea del Sur puede que sí, hasta es un tabú, pero existe casos de jovencitas, así como ella.

— Al menos es de Aron de quien te fijaste— dijo Krystal para sí misma— Aron tiene un buen corazón a comparación de otros chicos que crecieron por allá. Karl — dijo lo último en susurro.

Se llamaba Karl.

Aún recuerdo el ultimo sabor que sentí al pronunciar tu nombre. Desamor. O eso pensaba, porque ahora es solo rencor y decepción hacia si mi misma por caer tan bajo.

Siempre huyendo de tu recuerdo.

Karl era el chico popular de la secundaria, el típico chico rubio, con músculos y de la alta sociedad, parecía un chico tonto, pero no lo era del todo, al menos no para jugar con sentimientos. Siempre consiguiendo lo que desea.

Sus ojos celestes te hundían como en un mar marino de aguas claras. Oh si, Krystal no fue la única que cayo.

El siguiente popular que seguía era Aron, su amigo, a diferencia del otro, Aron si respetaba los sentimientos de los otros y era — y aún sigue siendo— inteligente.

— Cierra tu boca— dijo Aron a Krystal.

— Aron— dijo avergonzada y de reojo vio como el tal Karl la miro y saludo con la mano como si fueran amigos— ¿estoy soñando? — pregunto en susurro a su amigo mientras igual agitaba su mano para responder el saludo.

— No seas obvia— le pidió cuando vio que el chico se acercaba— contrólate.

Krys asintió, incluso se le fue difícil no mostrar sus nervios.

— Hola Krys, hola Ron— saludo con diminutivos y con bastante confianza como si fueran grandes amigos.

— Hola — respondió Krys como niña linda.

— Aron — pidió que le diga, y no es que no fueran amigos, o al menos tenían unas buenas conversaciones, hasta que...

— Bueno Aron, los quiero invitar a mi fiesta— dijo mirando a Krys al final— sé que Krys no podrá sino vienes vos más.

Aron frunció las cejas para Karl.

— Espérame aquí — dijo Aron a Krys con paciencia— ven— le dijo con seriedad a Karl.

Karl asintió y siguió a Aron con una sonrisa satisfecha.

— Déjala en paz, te dije— amenazo.

— Dicen que las mujeres coreanas son bien estrechas y...

— Deja a mi amiga— grazno.

— Amiga como dijiste, no es tu novia, ella puede cuidarse sola.

— Si la...

— Ella vendrá a mi recuerda— dijo como ultimátum.

Krys no se enteró de esa charla hasta ese día en que Aron se lo confeso en el momento más débil de su vida y el querer conseguir el amor de Karl nuevamente— aunque nunca lo tuvo—.

Aron cedió ir a la dicha fiesta por insistencia de Krys. La fiesta estaba repleta, hasta de bebidas y drogas. Krys quedo asustada, e inmediatamente pidió irse a Aron, a lo que él no se negó, hasta que apareció el mismo Karl.

— Llegaste — dijo con voz alta y alegre debido a la música.

Era tan ingenua esas veces.

— Vamos a bailar— la agarró de la mano alejándolo de Aron, mientras que este era interceptado por los compinches de Karl y una que otra chica.

Krys quedo quieta, su modo tímido hizo presencia. Sabia bailar, pero con Karl y que la vea. No.

— ¿No bailas? — pregunto Karl, y ella negó. Mintió — te enseño.

Y le enseño a bailar muy apegados. Incomodo a Krys, pero luego se acostumbró.

Yo solo pensaba que le empezaba a gustar en otro ámbito, no del sexual.

Me hablo lindas palabras, que a la primera propuesta le dije ya.

Le pidió que sea su novia esa noche y con aquellos poemas baratos sacado de internet y las típicas palabras que siempre le gusto y que por ello hacia todo ello para llamar su atención.

Sí que caí redondita.

Después de aquello Aron siempre estuvo atenta a Krys, incluso Karl fingió estar celoso de él, consiguiendo alejar a Krys de su amigo.

Con aquel separamiento cambiaron varias cosas, y enterarse sobre las infidelidades de su supuesto «novio»

— Yo te vi— dijo Krys con lágrimas en sus ojos.

— Eres muy niña para mí— dijo Karl, sin negar todo ello— necesito una mujer.

— ¿A qué te refieres con ello? — pregunto con miedo.

— Que te entregues a mí y así estaré seguro que me amas— escucho lo que nunca creyó oír en su vida.

— Eso no es amor— dijo Kryss.

— ¿Estas cuestionando mis sentimientos hacia ti? — dijo furioso.

— No es ello— dijo con miedo.

— Terminamos — dijo sin dar tregua a una discusión.

— Pero...

Y fue allí cuando por primera vez sintió un corazón roto, o al menos eso creía en un inicio.

Yo solo me deje llevar por los deseos e ilusiones de otras.

Busco los brazos de Aron, le conto y le dijo que iría donde Karl y le diría que sí. Aron la pudo persuadir varias veces, hasta que el sinvergüenza se hizo ver en pleno acto con una chica pronto a salir de la secundaria.

Lloro y lloro Krys.

— Eras solo un objetivo, Krys— informo Aron para que no haga una locura.

Pero mi obsesión me llevo a otra cosa a pesar que me advirtió Aron.

Fui y lo busqué, me prometió que volvería conmigo si me entregaba a él, pero...

Aquel día Krys le entrego su primera vez y el maldito la había grabado y viralizado.

La había lastimado como mujer y tuvo que cambiar de colegio junto con Aron porque él lo golpeo. De Karl no supo más, ya que también fue sacado de la secundaria.

Krys trato de vivir normal en su otra escuela, pero siempre era lo mismo y se enteraban de ese su pasado y la apodaban zorra y puta.

Sus appas no tuvieron más opción que mudarse de país y ahora estaba en Corea, donde nadie sabía ese su tétrico pasado, más que Aron.

— Oh, lo encontré— dijo de la nada al entrar a la Deep Web— y nadie me creerá y Aron no quedra hacerlo.

Inmediatamente saco foto y cerro la página.

Urushdaur [Minron]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora