-¿Tienes información sobre Bucky?- Pregunté.
-Estuvo en Sokovia después del accidente- Respondía arrojando la toalla sobre su hombro.
-¿Llegaron a tener aliados en Sokovia?- Cuestionó pasando una botella de agua.
-Strocker murió al igual que pietro, Wanda esta dando todo para convertirse en una Vengadora- Observé a los demás aun entrenando.
-Tenemos que encontrarlo- Añadía forzando más la mordedura.
-¿Estas bien?- Analizo los nervios transmitirse en mis ojos.
-Estare bien cuanddo termine con el- Volvía a mirarlo.
-Asesinarlo no es una solución, haremos esto de una manera diferente- Sentenció sin dar un paso atrás ante sus palabras.
-¿Quien dijo que lo asesinaré?- Formente una sonrisa divertida.
-Mary- No tenía ninguna diversión en su rostro.
-Lo siento, esta bien, seguiremos el plan- Me rendí.
-Aun así, esto lo tengo que hacer sola- Advertí sintiendo el miedo en mis palabras.
-Buscar el perdón de tantas personas, el perdón del gobierno, esto es agotador- Suspire.
-¿Donde queda tu lamento?- Cuestionó.
Lo observé sin pronunciar ninguna palabra.
-Hay días en los que logró perdonarme, otros donde solo me tengo odio y rencor...Días donde solo no quiero estar más aquí- Murmure caminando hacía uno de los gran ventanales.
-No es fácil convencerte de una palabra sin sentir el verdadero significado de ella- Siguio mi camino hasta colocarse aún lado mio.
-Fueron unos increíbles meses- Sonreía mirando la naturaleza a las afueras del lugar.
-Volveras a conseguir la paz- Frotó su mano en mi espalda hasta sujetarme del hombro, creando un momento empatico de amigos.
Dimos un respiro profundo exhalando a la misma profundidad admirando la vista, demasiado realista.
Los minutos de silencio hablaron mas que las palabras.
Steve sabía que en el fondo lo necesitaba y el estaría dispuesto a ayudarme sin importar nada.
El sentimiento de culpa y arrepentimiento no permitían gritar mis palabras de ayuda.
Tony padecía de un silencio abrumante, sin mencionar el tema hasta que yo lo hiciera, guardando todo para el, solo me miraba, me cuidaba, me brindaba el mejor cariño del mundo, guardando sus ideas y descubrimientos en la tecnología, para mi desvelandose cada noche hasta las últimas gotas de sueño en encontrar algo mejor que un anillo de compromiso.
Natasha se convirtió más que una compañera, brindando cada apoyo moral de su lealtad en una pequeña hermandad que se había formado gracias a Steve.
Extrañaba a Barton y sus bromas incoherentes, sonreía al recordarlos, son una maravillosa familia.
-Agente Jones- Habló Nat atrás de nosotros.
-Agente Romanoff- Sonreía mirándola atraves del ventanal.
Intercambiamos un enorme abrazo dejando las sonrisas aún lado.
-¿Ya terminó la mudanza?- Preguntó estando aún lado de Steve.
-Para nada, aún no comienza, a Tony le cuesta abandonar la torre- Respondía desanimada.
-Fue su segundo hogar por largos años- Entendió la situación.
-¿Tu? ¿Bruce?- Recordé al hombre verde y su magnífica mente de científico loco.
-Todo sigue exactamente igual, no hay nada nuevo- Bajó la mirada.
Steve observó todo, sintiendo una enorme pena.
Miré su mano tratar de tocar el brazo de Nat, pero se negó por completo controlando su impulso.
-Hay demasiados sentimientos aquí- Hablé mirando a Steve de reojo.
-¡Hey!- Wanda se acercó con Sam atrás, se notaba muy cansado.
Extendía mis manos esperando a que llegara con una enorme sonrisa.
-¿Todo bien?- Pregunté cuando finalmente estuvo con nosotros.
Asintió con algo de negatividad en su mueca no tanto sonriente.
