-Happy, puedes esperarme aquí- Insistí antes de entrar.
-El señor Stark me pidió que la cuidará en todo momento- Volvió a negar.
-Happy- Sujeté sus hombros, estaba tenso.
-Es una carcel, soy una criminal, hay guardias en cada esquina.
-No me tardaré, si llego a necesitarte te hablaré ¿Si?-El Señor Stark me matará- Asintió sintiendo ya los regaños de Stark.
-Gracias amigo- Sonreía dejando de tocar al hombre.Entré finalmente, habían demasiados protocolos de seguridad.
Había pasado por demasiados que evadi unos cuantos eliminando la certeza que tenía un brazo artificial.
Me dirigían a la sala de visitas en silencio.
El piso tenía algunos charcos de agua.
Las luces eran tenues alumbrando el largo pasillo.
Se escuchan ruidos exóticos de los animales enjaulados.
Policías de cada nivel en cada esquina.-Espere aquí- Ordenó el policía haciendome sentar en una pequeña silla frente a una mesa que tenía una silla del otro lado.
Guardé asiento, junté mis manos en la mesa entrelazando la tela del guante con mi piel, jugaba con mi pierna subiendo y bajando el talón, resguardando la desesperación en la espera abundante.
Una celda sonó al igual que su auténtico ruido "abierto".
Sus pisadas graves y pesadas sonaron del otro lado de la habitación.
-Los Vengadores deberían estar salvando el mundo- Habló dejandose ver por fin bajo las tenues luces del jugar.
-No soy una Vengadora.
-No- Reía sarcásticamente.
-Eres Mary Jones, es un nombre un tanto...vulnerable- Analizaba el lugar a nuestro alrededor, completamente solos.-Me alegra que observes el lugar, tu hogar.
-¿Por eso estás aquí? ¿Veniste con el nombre de un exitoso empresario a burlarte del lugar donde mereces estar?
-Stark no solo es un exitoso empresario, es un mejor hombre que tu- Respondía deslizando mis manos sobre la mesa hasta cruzar de brazos.
-Si- Suspire.
-Queria asegurarme que realmente estuvieras aquí.
-Este es nuestro hogar, aquí terminarás tu también- Soltó mirandome con cinismo.
-Mi tiempo se agotó, el tuyo esta por agotarse, sigue viviendo en tu estupido mundo irreal-Reía mostrando una expresión de asquerosidad.
-El único amor irreal es donde tu ambición trata de expandirse por el verdadero mundo- Rectifique sus palabras con la misma expresión.
-Vamos Barnes, tu absurda venganza termino, gané, siempre he ganado ¿Lo recuerdas?- Sonreía maliciosamente.-Ganaste, esta bien, lo acepto ¡Te felicito!- Levantó las manos mostrando alguna especie de vulnerabilidad.
-No soy la única persona que quiere venganza, Jones.Suspire burlesco, levante más la cabeza observando su rostro.
-Tu nunca podrás asesinarme.
-Jamas permitirías que algo me pase.
-Conozco tus debilidades, tu mayor debilidad soy yo, no me obligues a cortar mi cabeza, por que lo haré.-¡El tiempo se termino!- Un guardia grito atrás de la puerta de hierro.
-No me volverás a ver, no volverás a causar daño, todo se termino- Replique con orgullo.
El solo guardio silencio clavando su mirada en mi.
No había más del que dialogar, todo finalmente se había terminado.
Me levanté de la mesa mirándolo con seriedad.-¡El soldado del Invierno volvera! ¡Tu volverás!- Se levantó molesto golpeando la mesa.
-¡Yo me encargaré de eso!Deje de caminar, mirando aún la salida con el hombre esperándome.
-¡Quiero que entiendas! ¡No puedes olvidar lo que eres!
-Tu me enseñaste todo, lo sé- Disminuyó su tono de voz.
-Yo te enseñaré la verdadera persona que eres, Hydra borró tu mente cientos de veces y en cada una me encargué de que vuelvas a ser la misma, volveré a hacerlo.