EUPHORIA [JJK]

Capítulo treinta y tres

Aun cuando me esforzaba por evadirlo, el estrés intentaba carcomerme viva.

A pesar de que el asunto de los inversionistas había sido arreglado,  no dejaba de sentirme frustrada por el hecho de retrasar las fechas del lanzamiento de la colección.

Me encontraba en el escritorio de mi estudio, todavía solucionando algunos detalles tras lo ocurrido, cuando el llamado a la puerta desvió mi atención.

— Adelante.

— Hola Sun, — era Namjoon — espero no estar interrumpiendo.

— ¡Nam! Hola. Pasa, claro que no me interrumpes.

Namjoon sonrió mostrando sus lindos hoyuelos y tomó asiento frente a mí.

— ¿Cómo estás? ¿Qué tal el trabajo?

— He de contarte. Surgió un problema en mi empresa. Ya se solucionó, pero trajo consigo un poco de desastre.

— Uy, ¿Es muy grave?

— Mmm, un poco.

— Lo lamento, Sun. Espero que todo mejore pronto — sonrió.

— Gracias Nam — le sonreí de vuelta. — ¿Y qué te trae por aquí?

— Ah, tuvimos que venir para concluir con algunos detalles de nuestra participación. Los chicos están en la cafetería. Ya nos íbamos, pero quise venir a verte antes. Me gustaría hablarte de algo.

— Claro, ¿Qué ocurre?

— Como ya sabes, se acerca el cumpleaños de nuestro Jungkookie, y los chicos y yo estábamos pensando en darle una sorpresa especial y, no sé, creí que tal vez te gustaría ayudarnos con ello.

— Sí, por supuesto, ¿En qué puedo ayudarlos? ¿Necesitan que compre algo?

Namjoon se rió nerviosamente — Bueno, no en realidad.

— ¿Ah? ¿Entonces?

— Queremos que la sorpresa sea que tú asistas a su fiesta de cumpleaños.

De repente comencé a atragantarme con mi propia saliva. Era torpe, pero ese incidente no se debió a mi torpeza.

— Perdón, ¿Que yo qué?

— Sabes que eres especial para él, y sé que le agradará verte en un día tan importante.

— ¿Crees que sea una buena idea? — cuestioné preocupada — Es que, no sé, ¿No sería un poco raro, quizá incómodo? Me refiero a que asistí a sus cumpleaños antes, cuando él y yo... Ya sabes... Salíamos.

Nam suspiró y se quedó pensando por unos segundos — Creo que Jungkook ya lo ha entendido. Al principio le fue muy complicado, en especial lo que pasó después de que confirmaste tu partida.

— ¿Qué fue lo que ocurrió después?

— Jungkook se enteró de nuestra llamada, y se molestó porque no quise contarle nada de lo que hablamos. El chico la pasó mal realmente, — agachó la cabeza — incluso insistía en viajar a México para buscarte. Suele ser muy impulsivo, todos creímos que realmente lo haría.

~

El día siguiente después de mi regreso fue sin duda el más difícil de todos. Despertar en mi cama después del insomnio instintivo por el cambio de husos horarios, no ver a mi compañera de departamento preparar el desayuno, no tener que alistarme para ir al trabajo que tanto disfrutaba. No recibir la dosis de sarcasmo diario por parte de mi jefa.