💙Aoimoku 💙- Satoru Gojo✔

XXX

Ahora sólo caminaba tranquila por uno de los pasillos, hasta que escuche un golpe no tan lejos. Fui a paso apresurado y llegue justo en el que un chico se bajaba la cremallera que cubría su boca.

-¡Detente!- dijo fuerte y claro. Le decía un tipo de notable musculatura. No entendí que sucedía hasta que logré ver a Megumi a unos metros lastimado.

-¿Qué paso?- pregunté mientras me acercaba al chico lastimado. Tenía algunas heridas y raspones, frunci el ceño y me gire a ver al tipo-¿Cuál es tu problema?!

Aparecieron más chicos mientras miraba con enfado al musculoso. Dos chicas parecidas de cabello verde, un.. panda? Nobara quien estaba algo lastimada y el chico que grito.

-Solo veníamos a ver quienes eran el reemplazo de Okkotsu para el intercambio- dijo con simpleza la chica de cabello cortó- ¿Y tu?.

- Soy Tn..de primero- hable un poco más calmada, frunci el ceño y mire al musculoso- eso no explica el porque golpeaste a Megumi.

-Si- hablo mientras me miraba, me escrito con la mirada de arriba hacia abajo- no son muchas curvas pero las suficientes- murmuró- Si!!! Desde hoy serás MY SISTER!!- grito feliz- Mai vamos!! NOS VEMOS SISTER!!

Mire sin terminar de comprender. Se alejaban tranquilos. Luego sólo me gire aún pensando cuando los cables terminaron de encajar en su sitio.

-¿Son los de Kyoto?- pregunté con desgana, mire a Nobara quien asintio- vaya forma de llegar- murmure.

-Un gusto, Soy Panda- se presentó el...panda.

-Maki- dijo la chica de lentes- y él es Inumaki- presentó al chico albino. Lo mire y este levantó su mano de forma saludando.

-Hoyuelas de bonito- dijo este, lo mire extrañada... ¿por qué se dirigia a mi con ingredientes?

- Por...

- Posee el discurso Maldito- explico Maki. Asenti sin entender, algo había oído de parte de Satoru, luego le preguntaré mejor.

-Posees mucha Energía maldita- mencionó Panda mirándome con curiosidad. Me acerqué a Megumi y lo ayude a levantarse para poder llevarlo a enfermería.

- Si, me lo han dicho muchos- dije con una pequeña sonrisa- llevaré a Megumi con Ieiri y luego comenzamos con el entrenamiento- hable. Ellos asintieron y fueron con Nobara quien estaba mejor.

Al llegar a enfermería, Ieiri y Megumi me agradecieron. Cuando cerre la puerta volví al campo de entrenamiento, allí panda estaba lanzando por los aires a Nobara y Inumaki la atrapaba.

-Bien, tu entrenadas conmigo- dijo Maki al acercarme- veamos que tan resistente eres- colocó un temporizador.

Ni bien lo dejo en el suelo se acercó a mi a una rápida velocidad, con su puño derecho dirigido directamente a mi rostro. Lo esquive sin saber como y me aleje. Sonrió un poco ante ello.

-Buenos reflejos- alago.

Pero en cuestión de segundos volvió a atacar. Esquivaba algunos de sus golpes pero la mayoría me atacaba. Era un entrenamiento de resistencia. Todo lo que yo hacia para defenderme y poder ensestarle aún que sea un golpe, no funcionaba.

Caí rendida al suelo cuando no di más del cansancio. Tomaba varias bocanada de aire mientras estiraba mis extremidades en la tierra.

- Pausa- dije con cansancio. Mire como Maki también estaba cansada pero menos que yo obviamente, no había logrado ensestarle un golpe sólo.

- De acuerdo- se acercó al cronómetro- bien, cinco horas seguidas sin descanso- alago. Mire el cielo, ya había comenzado a anochecer- mañana seguiremos, a la misma hora.

Se acercó donde estaban Panda e Inumaki. Nobara vino donde yo estaba y se tiro a mi lado mirando también el cielo.

- Van a matarnos- dijo con cansancio. Gire mi cabeza a verla, hizo lo mismo que yo y sin más nos largamos a reír.

Narrador omnisciente

Cierto albino miraba su celular. Para ser la primera vez que llegaba antes que la otra persona era impaciente. Miro el horario. Él llegó casi cuarenta minutos tarde, pero la otra persona ya lo superaba.

- Perdón por la tardanza- dijo la voz femenina de atrás suyo. Se giró y miro a la fémina- ¿esperaste mucho?- hablo con cierto coqueteo en la voz.

- No mucho, llegue hace diez minutos- respondió el albino con cierta gracia.

-¿Aprendes de mi?- pregunto burlesca. Ambos rieron con cierta diversión y comenzaron a caminar.

Satoru había mentido cuando dijo que tenía una reunión, bueno, no del todo. El as alto iba caminando con tranquilidad, la mano en sus bolsillos y en lugar de la venda, lentes negros que había se habia cambiado hacia unos instantes.

- Creí que por fin te dignarias a invitarme a salír, ya sabes, ir a un bar y... ver que pasa luego- a la mujer sin duda le encantaba coquetear con el más alto, pero había algo que le gustaba más. El albino suspiro.

- Tal vez lu hubiera hecho de no se porque te debo dinero- dijo con cierto tono de nerviosismo en la voz. La mujer soltó una risita- enserio, Mei necesito tu ayuda.

- Soy toda oidos- respondió.