Secretos ✨L. S✨LT. ~COMPLETA~

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Aaron les prestó su casa para la despedida de soltero de Louis, donde iban a estar varios chicos del equipo de soccer, Zayn y Liam.

Durante un par de meses habían estado organizando todo. La reunión se iba a llevar a cabo una semana antes del gran evento, ya que estarían un poco apresurados con los exámenes finales.

Estaban a punto de graduarse. En algunos días todo acabaría; mientras tanto digamos que Louis y Harry tuvieron una pequeña pelea cuando el rizado se reconcilió con Edmund debido a una plática que el escocés se esforzó en que fuera escuchada.

—¿Y qué?— se alzó de hombros ante los reclamos de Louis— Sólo es un amigo, Lou.

—¡Un amigo que quiere venirse en ti!— gruñó, las mejillas de su prometido se pintaron de un rojo intenso— No quise decir eso.

—Claro que quisiste decir eso, eso es lo que piensas— se alzó de hombro, avergonzado—. No soy un cualquiera.

—Yo sé que no, pero él si— se acercó—. No quiero que te relaciones con ese cabrón.

—¿Por qué no? No me ha hecho nada malo...— lo interrumpió.

—Hazz, ¿en serio?— hizo una mueca— Me he peleado con él varias veces por ti. ¡Para que deje de molestarte como un jodido perro faldero!

—No es necesario que grites— bajó la mirada.

—No es necesario que tu seas un iluso— se levantó y salió de la habitación azotando la puerta.

A la mañana siguiente Niall llevó a su hermano en el auto, ambos estaban tan enojado que Louis fue a dormir a casa de su abuelo con su madre y hermanos.

—¿Qué fue exactamente lo qué pasó?— preguntó su hermano.

—Se entero de que hablo con Edmund— suspiró—. Tú mejor que nadie sabe que yo no tengo nada que ver con él.

—Su falta de comunicación me estresa demasiado— rodó los ojos—. No pueden tener estas peleas a unos días de la boda.

—Ya sé que en algunos días es la boda, pero no se por qué se ha enojado tanto— suspiró.

—¿Eres tonto?— su hermano se volvió para verlo— Eso me dice que si. Harry, es justo que esté enojado por eso, es válido.

—¿Tú te hubieras enojado?

—Si. Mucho.

Harry dejó salir un gran suspiro.

En el aparcamiento se vieron, sólo se vieron, ninguno de los dos se acercó.

—Ve con él— Niall le dio un empujón.

Harry trastabillo y caminó directamente a su prometido.

—Hola...— estiró la mano, Louis no la estrecho.

—¿Qué quieres? ¿Necesitas algo de dinero?

Si bien tenían un poco del dinero que la beca les ofrecía, Louis había entrado a trabajar como entrenador de niños de primaria, le pagaban muy bien y había adoptado el papel del esposo que mantiene a su mujer, compraban cosas para su pequeño hogar que, básicamente, era la habitación de Harry.

—No— negó.

—¿Entonces?— se cruzó de brazos.

—¿Podemos hablar?— estiró la mano para acomodar su corbata. Louis suspiró.

—Ya estamos hablando, ¿no?

—No exactamente— dijo haciendo un poco de puchero.

Edmund se acercó poco a poco debido a la tensión que podía sentirse. No deseaba molestar, pero había olvidado hacer la tarea y seguro que Harry la había hecho.