All These Years • jb [3]

Extra; La boda

No One's POV:

El estridente sonido de un par de despertadores retumbó en la amplia suite, interrumpiendo el sueño de todas las chicas a excepción de una rubia que llevaba ya más de media hora en pie.

—¡Hora de despertarse chicas! —Liv se dirigió a las habitaciones en las que dormían Zoe, Chris y Faith.

—Vete a la mierda —espetó la más mayor antes de lanzar un cojín que Liv consiguió esquivar agachándose.

—En quince minutos os quiero a todas en el salón, tenemos mucho que hacer —ignoró su comentario y se alejó de allí para dirigirse a la habitación en la que se encontraba Blair y donde ella había dormido—. Buenos días a la protagonista de hoy. —Sonrió ampliamente.

—¿Por ser la protagonista no tengo derecho a dormir más? —preguntó Blair sin apartar su cara de la almohada.

—Por supuesto que no —respondió Liv acercándose a la puerta de cristal que daba al jardín para descorrer las cortinas—. He avisado al servicio de habitaciones para que traigan café y alguna cosa más para desayunar, yo aprovecharé para ir a ver a Dan y los niños, ¿vale? Aunque me da a mí que probablemente volveremos tres. —Esbozó una mueca.

—De acuerdo —murmuró Blair aún medio dormida.

Cuando escuchó como la puerta de la amplia suite se cerraba, indicando que su mejor amiga acababa de salir de ésta, soltó un largo suspiro y giró en la cama, quedando mirando hacia el techo a la vez que se desperezaba. Y fue ese momento en el que las palabras de Liv calaron por completo en ella, desatando un cosquilleo que inundó su estómago. Por supuesto que no se había olvidado de que era el día de la boda, pero aquella frase de su amiga había conseguido que fuese más real. Llevaban prácticamente un año planeando todo aquello y al fin se iban a dar el "sí quiero" en el altar, frente a sus familias y amigos.

Un suspiro nervioso se escapó de sus labios y volvió su cabeza hacia el vestidor de la habitación, donde se encontraba guardado el vestido que en unas horas se pondría. De nuevo el nerviosismo invadió su cuerpo y cualquier rastro de sueño desapareció.

—Buenos días. —Una voz hizo que apartase la mirada del vestidor y pudo ver a Faith de pie bajo el umbral de la puerta de la habitación, con cara de sueño.

—Hey. —Le sonrió incorporándose hasta quedar sentada sobre la cama.

La castaña se acercó a la cama y se sentó en ésta junto a Blair.

—¿Cómo estás? —Le preguntó abrazándose a un cojín.

—Hasta hace un momento cansada, ahora de los nervios —admitió haciendo reír a su amiga.

—Bueno, es totalmente normal... o bueno, eso creo porque no me he casado nunca —añadió consiguiendo que Blair riese—. Pero ahora hablando en serio, no tienes que preocuparte por nada, hoy es un día para celebrar. —Se encogió de hombros.

—Lo sé, lo sé —Asintió escondiendo un mechón de pelo tras su oreja—. Es solo que llevamos mucho tiempo planeando esto y quiero que todo salga a la perfección.

—Y si no es así no pasará absolutamente nada —Faith negó con la cabeza—. Todos estamos aquí por vosotros, Blair, no por lo que sea que hayáis planeado —Le recordó—, te aseguro que a nadie le importará si algo sale mal.

—Gracias. —Le sonrió y se acercó un poco a ella para poder abrazarla.

Desde allí pudieron escuchar como llamaban a la puerta y poco después a Chris hablando con quien fuera que les había traído el desayuno.