All These Years • jb [3]

Veinte; Consecuencias

Justin's POV:

—Hey —Gianna entró a mi despacho—. ¿Listo para irnos?

—Sí. —Asentí y me levanté.

Cogí el maletín de encima del escritorio y me acerqué a ella, entrelazando los dedos de nuestras manos.

—¿Qué tal ha ido el día? —Me preguntó curiosa mientras caminábamos por el pasillo, en dirección hacia los ascensores— No nos hemos podido ver desde que hemos llegado esta mañana.

—Bueno, algo ajetreado, la verdad —admití—. ¿Y tú qué tal? ¿También habéis tenido trabajo?

—Pues sí —Soltó un largo suspiro a la vez que recolocaba su gran bolso sobre su hombro—. Pero bueno, hemos terminado con todo lo que teníamos pendiente, así que probablemente mañana el día será mucho más tranquilo. —Sonrió antes de presionar el botón para llamar al ascensor.

—Genial. —Sonreí yo también.

—¿Tú mañana te pasarás por aquí?

—Sí, tengo una reunión y algunas cosas por hacer, pero supongo que para después de la comida ya habré acabado.

—Oh, ¿qué tal la reunión con Blair? —Se interesó, provocando que yo me tensase un poco.

—Bien, bien. —Me apresuré a contestar.

Realmente aquello no era ninguna mentira, la reunión había ido de maravilla, el problema había llegado después.

—Me alegro —Sonrió antes de adentrarnos en el ascensor—. ¿Le habéis comentado eso de hacer una colaboración en español?

—Sí y dice que lo intentará. —Le di al botón de la planta principal y pronto las puertas se cerraron.

—Creo que es una idea bastante buena —admitió—. Es decir, nunca ha probado algo así y creo que a la gente le gustará verla salir de su zona de confort, por decir de alguna forma.

—Sí, la verdad es que a Vanessa se la han ocurrido ideas bastante buenas.

—Es de las mejores del equipo —Se encogió de hombros—. ¿Y qué? ¿Os ha enseñado alguna canción más?

—Sí, una nueva y dos que ya nos había enseñado, pero ha mejorado un poco. —Le expliqué.

—¿Y qué tal?

—Son buenas —Asentí—. Muy buenas.

—Ya, nada nuevo viniendo de ella, ¿no? —preguntó Gianna algo divertida.

—No. —Esbocé una pequeña sonrisa.

Y es que era innegable que Blair era toda una artista. Yo mismo había estado junto a ella viendo como, poco a poco, iba evolucionando y desde un primer momento supe que llegaría alto.

—Bueno, cambiemos de tema que hace un momento estaba quejándome del trabajo y ahora no paro de hablar de eso —Agitó su mano—. ¿Qué vamos a cenar?

—¿Tienes mucha hambre? —La miré curioso.

—No demasiada, es solo curiosidad. —Se encogió de hombros.

—No había pensado nada en concreto, la verdad —admití—. ¿Se te antoja algo en particular? Porque a mí me da bastante igual.

—No sé... —murmuró alzando la vista al techo— Pero podrías hacer la cena tú. —Sonrió volviendo a mirarme.

—¿Y eso por qué? —Alcé una ceja.

—Pues porque hace mucho que no me cocinas —Se aferró a mi brazo—. Anda, va...