Buenas buenas buenas! Me ha costado mucho escribir esta capitulo.
¿Por qué? Porque quiero haceros recordar, mmentos determinates de la vida de esta bella pareja, y que sin duda son importantes, ya que la historía esta llegando a su fin.
Hoy le toca recordar a Raúl, puesto que fue quien tuvo la idea, el que recuerde como paso todo, como empezó todo. ¿Alguein se acuerdad? Hoy lo reviviremos...
El siguiente capitulo estará orientado a África viviremos desde su punto de vista algunas cosas que pasaron y que la llevaron a ser lo que es hoy.
Espero que os guste, nos vemos pronto.
Disculpar lo mucho que he tardado en subir este capitulo, pero lo he escrito, borrado, y vuelto a escribir. Hasta que me ha medio convencido.
Un besito, y mil gracias por vuestra INMENSA paciencia...
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La vida es como un juego, sabes cómo empiezas, pero no como acabas. Cuando todo parecía ir bien, mi madre nos contó que tenía cáncer. Fue como descender al mismísimo infierno. Impotencia. Tristeza. Mal humor…
África estuvo junto a mí durante ese duro trance, durante esa dura guerra, y si cabe, nos unió a un más. Ha aguantado cada día de mal humor mío, cada día de tristeza, cada día de euforía, cada día de depresión absoluta. He tenido momentos en los que no quería salir de la cama, ni ducharme ni comer, pero ahí estuvo ella, obligandome a hacer todas las cosas que no quería hacer y más.
Empujandome a pasar cada minuto posible junto a mi madre; Todos confiabamos en que se iba a curar y gracias a dios, ha sido así. Pero eso no significaba que no existiera la posibilidad de perderla, y África me ayudo a pasar cada minuto como si fuera el último.
Cada día la amo más, cada día soy más consciene de que no puedo vivir sin ella, no se vivir sin ella. Es mi tendón de aquiles, es mi pilar en la vida, es mi corazón, es el puto centro de mi maldito universo joder.
No hay día que no le agradezca a dios, a la vida, al destino, que aquel día, mi conciencia me mandara directo a hablar con África porque me había enterado de que estaba llorando…
-Papi me voy, que he quedado.- Dije acercándome a él.
-¿Cuantas van ya enano?.- Dijo Mario.
-Trece.- Dije de forma chula.
-Como su padre de joven, joder.- Dijo Jaime riendo, pero su mirada estaba apagada, quizás algo le preocupaba.
-¿Jaime te pasa algo?.- Dije preocupado, era como un tío para mi, era mi tío.
-No enano, a mí nada, es solo que mi pequeña últimamente no sale de casa y la veo triste y a apagada, no soporto verla así.- Dijo con el rostro mirando hacia abajo.
-No te preocupes hermano, algún mal de amores, se la pasara pronto.- Dijo mi padre.
-Jaime, te importaría que fuera a tu casa y hablara con ella. Sé que no nos llevamos muy bien, pero si puedo ayudarla...- Dije de forma sincera.
-Te lo agradecería mucho chiquitín, ¿Pero no tenías una cita?.- Dijo sonriéndome.
-La tenía, pero otra vez será, y si no otras estarán dispuestas.- Dije riéndome.
Salí de allí y puse rumbo a casa de África, me intrigaba saber por qué estaba mal, quizás algún mal de amores o algún problema en el instituto.
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Luchar para estar juntos
RomanceÁfrica y Raúl, están casado y tienen ya una preciosa parejita de gemelos, chico y chica. Raúl, orgulloso de su mujer, dedica sus días, a trabajar, recoger a los niños, recoger a su mujer de la universidad y pasar las tardes con su familia.África, de...