[COMPLETADO] Durmiente +Revali x Lector/a +

La Fiera Deidad Despierta

Glosario para este capítulo:
T/N: Tu Nombre.
N/A: No Disponible.
P.O.V: Punto de Vista.

___N/A P.O.V___

Estaban en el Altar ceremonial frente al castillo, el día era hermoso, todos en la ciudadela festejaban y atendían el festival.

Pero Zelda no, aún cuando hizo la promesa con t/n de ir con   él/ella/elle   a divertirse, su padre lo prohibió diciendo que no debía perder el tiempo en trivialidades, Daruk mientras tanto recordó durante una conversación con los campeones que en el pasado se hacían ceremonias oficiales para condecorar al héroe de la espada.

Según lo que decían las leyendas, el poder de la princesa se presentaba al dar su bendición como una señal de Hylia para que las cosas salieran bien.

Rhoam desafortunadamente escuchó ese comentario y ordenó a la princesa volver a usar su vestido para efectuar la ceremonia, ahora estaban ahí, Link se encontraba en el centro del altar ceremonial, de una rodilla con los ojos cerrados.

Zelda se hallaba de pie frente a él y estiraba una mano hacia aquel caballero, los campeones miraban desde una de las esquinas de la estructura circular.

-Héroe de Hyrule, el elegido por la espada que doblega la oscuridad... Has demostrado valor y destreza ante la adversidad y la oscuridad... Y por ello mereces recibir la bendición de la Diosa Hylia- los pájaros cantando alrededor de la llanura era lo único que interrumpía el sereno silencio que requería el ritual.

Nadie más que ella hablaba, era un momento sagrado o al menos eso es lo que se esforzaban por aparentar.

-Aunque esté surcando los cielos, a la deriva del tiempo, o sumida en las brasas del crepúsculo... La espada siempre estará unida al alma del héroe. Rezamos para que la unión entre...- Zelda se perdió en sus pensamientos, en sus espectativas de que su poder despertara en ese momento, pero nada pasó, sólo seguía ahí en una ceremonia a la que no le encontraba sentido.

-...Entre la espada sagrada y el héroe sea eterna.- bajó la mano y soltó un suspiro, vio a Link quien seguía quieto en aquella posición, sabía ese discurso al derecho como al revés, no sabía por qué recitarlo ahora era tan difícil.

Era porque no le tenía fe al caballero, o si quiera a ella misma.

Daruk miraba con cierta pena la escena mientras rascaba su blanca barba -Ay... Que falta de entusiasmo-

-¿Qué te pasa Daruk?- interrumpió Revali -Fuiste tú el que quería honrar al caballerito con una ceremonia ¿Esta farsa no cumple con tus expectativas?- preguntó con sorna, Mipha quien estaba a lado del general le miró con cierta reprimenda antes de volver a mirar a Link.

El orni en cambio llevó un ala a su cintura -Pero tienes razón, está claro que a la princesa ese chico no le inspira mucha confianza, ni a mí- dijo mientras apreciaba como Zelda recitaba una y otra vez las palabras del ritual.

Urbosa, cansada de la arrogancia del general finalmente se decidió a hablar -Muérdete la lengua, ese chico le recuerda todas sus carencias... Así que, es normal que se desmoralice-.

Zelda podía escucharlos de todas maneras, miró su mano esperando que surgiera un poco de poder pero nada, miró al piso con una expresión afligida en el rostro, luego a Link, era verdad...

Él resultó ser perfecto desde que se unió a la milicia, pero ella?...Ella llevaba años intentando cumplir las expectativas del reino, sobre todo de su padre, sentía que caía hacia un enorme vacío.

-Yo digo que vayamos al festival- dijo de repente Mipha en cuanto la ceremonia terminó, todos le miraron -Digo, podríamos ir al menos como espectadores al torneo, no? Se supone que el ganador o ganadora obtendrá un deseo por parte del rey- comentó.