El Castillo

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Glosario para este capítulo:
A/p: Apellido
N/A: No Disponible
T/N: Tu Nombre
P.O.V: Punto de vista

___N/A P.O.V___

El camino hacia el castillo fue corto, la marcha de los soldados, los caballos de la princesa y su consejera así como el de t/n parecían ir a un paso apresurado, más que nada porque la líder del grupo estaba ansiosa por revelar la noticia a su padre acerca de aquel hallazgo.

Tal vez, con ello... Su padre, el rey Rhoam le permitiría supervisar las investigaciones de las bestias divinas. Aunque también estaba preocupada por Águila, quien tenía medio cuerpo recargado en su caballo, había usado un artilugio que se negaba a nombrar.

Probablemente su padre no le permitiría dormir en una cama, no sin antes interrogarlo/a/e acerca de su estadía con el clan Yiga.

A pesar de las contrarias que Impa le daba sobre su seguridad, ella decidió que t/n entrara por una puerta trasera del castillo acompañado/a/e de la Sheikah para darle un cuarto y formalmente presentarlo/a/e ante el rey el día siguiente.

Zelda cambió su traje ceremonial por un atuendo real ajustado para su agitada forma de vida, una camisa de hermosa tela azul cielo, blanco adornado con bordes dorados, un gran cinturón, sus pantalones negros y botas cafés, el nuevo atuendo le parecía dar más movilidad que aquel vestido de hacía rato.

Revali volaba a suficiente altura para tener al grupo bajo su protección, se había separado e ido hacia algunos lados para deshacerse de un par de monstruos que esperaban entre los arbustos con la intención de emboscar a la princesa.

Impa meditaba, acerca del día siguiente, definitivamente interrogarían a t/n, y como se trataba de alguien que perteneció formalmente al clan Yiga, el rey Rhoam no sería tan piadoso, estaba destrozando su cabeza acerca de qué decir, hacer.

¿Cómo podría convencer que alguien de un grupo homicida no era tan homicida? Tal vez...

-Princesa- llamó, Zelda volteo a verle parando su caballo -¿Qué sucede, Impa?- preguntó la joven -Debo ir a Akkala, iré por una pequeña ayuda, si queremos que t/n no pase el resto de su vida en los calabozos del castillo, necesitamos que Prunia y Rotver nos ayuden a convencer al rey- propuso la Sheikah, ambas dirigieron su vista al... "Invitado/a/e".

T/n tenía las manos atadas, se le veía cansado/a/e al igual que su caballo "Ordon",ninguna de las dos se quería imaginar a tan desventurada alma siendo encerrada.

-Pe-Pero ¿Quién va a ayudarnos a meter a t/n al castillo sin que mi padre lo sepa?- preguntó alarmada ahora Zelda quien tenía los ojos bien abiertos por el miedo así como adrenalina, antes de separarse Impa volteó al cielo, Revali volaba cerca y lejos comprobando la zona.

-Que nos ayude el general Revali, que lleve a Águila a uno de los patios de entrenamiento- respondió la consejera -Confíe en mi princesa, no me separaría de usted si no supiera lo que hago, volveré en la mañana- prometió, algo en esas palabras calmó lo suficiente a Zelda como para que diera su aprobación.

Impa se separó del grupo galopando a toda velocidad hacia el laboratorio de Akkala, donde estaban las instalaciones de los científicos Prunia y Rotver.

Cuando llegaron al castillo era el atardecer, pasaron por una ruta alterna para no llegar directamente a la ciudadela, Revali agradeció aquello, bajó aterrizando de manera elegante frente a la princesa.

-Ví que su consejera partió así que decidí llegar hasta acá con usted para que tuviera protección adecuada- empezó a decir el orni inflando su pecho en un tono elegante, la princesa asintió -De hecho aún necesito tu ayuda, Revali, podrías...erh... - volteó a los lados un tanto incómoda y esperó a que los soldados se dispersaran entendiendo la indirecta.

[COMPLETADO] Durmiente +Revali x Lector/a + Donde viven las historias. Descúbrelo ahora