𝗕𝗔𝗗 𝗥𝗘𝗣𝗨𝗧𝗔𝗧𝗜𝗢𝗡 ♒︎ 𝗟.𝗝.𝗡.

〔50〕

Sin rechistar Miyoung siguió a Jeno y siguieron caminando hasta la entrada de una pequeña oficina donde probablemente se registren las vistas.

— Buenas tardes, ¿a quien desea visitar? —preguntó al parecer quien es la secretaria del lugar y vestida como enfermera.

— Lee Gyuri —mencionó el alto aún teniendo de la mano a la chica quien mira el lugar en silencio.

La muchacha tecleo unas cosas y ahí Miyoung aprovechó en hablar: — ¿Aquí esta tu mamá? —murmuró.

— Sí, y no me juzgues —respondió en murmullo.

— Yo no juzgo a las personas —mencionó.

— Puede ir a visitar a su madre, adelante... —dijo la mujer y Jeno asintió, guiando a Miyoung junto a él.

El camino para ir a donde se encuentra la madre de Jeno no fue tan largo, ¿o tres puertas de distintas habitaciones y las del baño para luego pasar a donde está su madre es mucho? No, por lo menos para Miyoung no.

Llegaron a la puerta indicada son de ahora Jeno soltó su mano para abrir poco a poco para finalmente que Miyoung vea una escena desatadora.

Jamás pensó conocer la madre de Lee Jeno en estado vegetativo. Nunca.

¿Ese es el era de su madre? ¿Intentó darla por muerta, cuando no es así, solo que no puede hablar ni tener conciencia de nada?

El chico no se volteó a ver el estado de pausa; y un poco, solo un poco de culpa que esa mujer le provocó en ese estado a Miyoung. Jeno se acercó a ella viendo con una sonrisa y mirada triste se acercaba a su madre, no sin antes tomar dos sillas delante de la mujer siendo una para él y otra para Miyoung.

Gyuri miraba sin expresión alguna a su hijo; según había escuchado decir de su madre alguien en estado vegetativo es aquel que solo puede tener los ojos abiertos sin tener posibilidad de hablar u hacer algún movimiento con su consciencia. Y este es el caso de su madre.

Saliendo de su estado, caminó lentamente hasta tomar asiento y ver mejor a la mujer. Una máquina de vía respiratoria conectaba con su nariz para brindarle oxígeno; su cuerpo está algo así como una "S" pero no tanto; un traje como de usar en la casa rosa; piel arrugada; un pañal de adultos; y finalmente otra máquina que conecta a su vena.

— ¿La alimentan por vena? —fue lo primero que preguntó sin intentar sonar nerviosa.

— Si —respondió el chico—. Es la única manera en la que pueden alimentarla.

Ahora su pregunta fue: ¿desde cuando está así? Según su madre también, pacientes así duran de seis meses de vida; salvo a que sean a dos hasta máximo cinco años. Debió de pasarle algo durante esos meses o posiblemente esos años.

La mujer dejó de ver a Jeno para ver a Miyoung, quien parecía a punto de explotar porque altas ganas de llorar tenía.

— ¿Verdad que es linda, mamá? —dijo Jeno y eso hizo... poner nerviosa a la chica—. Ella es Shin Miyoung, la chica que te dije.

Mira Mimi, ¡habló de ti con su madre!

Y eso la sorprendió.

— ¿D-Desde cuando está así? —preguntó de la nada y se golpeó mentalmente por titubear. Quería verse sin nervios ni nada a la hora de hacer la pregunta, pero no pudo.

— ¿Desde? —ella asintió, esperando una respuesta... o tal vez no—. Hace dos años.

Ella parpadeó sorprendida, a durado algo: — Guau... a sobrevivido...

Él frunció su ceño: — ¿Cómo sabes eso?

Ella soltó una risa pequeña: — Mi madre es enfermera, rudo —le contestó.