Puede que no me supiera el número de mi esposa, pero ahí me tenían como un loco, buscando los chats de hace más de seis meses, tratando de dar con el número de ella. Iba viendo casi de conversación en conversación. Y ya me estaba cansando de eso.
Me estaba aburriendo, y estaba por dejar eso ahí y resignarme a comer la comida de Lupita, cuando ví nuestra conversación. Agradecí a la vida. Gracias, sabía que te preocupabas por mi alimentación.
Iba a marcar desde mi celular, pero creí que, si lo hacía ella no me iba a contestar, por alguna razón creía que ella no era igual que yo y que seguía teniéndome registrado. Así que comencé a llamar por el teléfono de mi oficina, la primera vez que marqué me decía que estaba ocupada, volví a intentarlo, uno, dos, tres veces más y nada. Pero con quién carajos hablaba tanto esa mujer. Tampoco era como que espere mucho para devolver las llamadas. Decidí esperar, mientras leía un documento que me acababan de pasar. Terminé de leer y entonces dije que era el momento, y ahí estaba marcando el número con los nervios a flor de piel. Creo que iba a colgar mejor, de todos modos la comida de Lupita no sabía mal. Escuché su voz.
Oh, oh y no sabía que decir así qué salude normalmente, con un hola. Ella reconoció mi voz enseguida y tomó todo de manera positiva. Así que esa noche tenía comida riquísima de nuevo. Estaba muy feliz y no entendía el por qué si hace tan solo unos días yo odiaba a esa mujer como si no hubiera mañana. Y lo único que quería era que se fuera lejos y jamás volver a verla en la vida. Bueno pero hace unos días yo no sabía que ella era la que hacía mi comida, a la que yo era adicto. Así que muy contrario a eso, me encontraba ansioso deseando que fuera la hora para irme a casa.
Comencé a ordenar algunas carpetas. Cuando termine ví la hora 3:38.
Ordene mi escritorio, 3:45.
Arregle la estantería donde habían libros, 3:50.
Pero que carajos, porque pasaba tan lento el tiempo. Me puse a ordenar y a limpiar lo más lento posible el archivo, 4:00. Agh odiaba el reloj, si lo adelantaba, contaba cómo que ya era hora. Estaba muy dispuesto a hacerlo cuando me di cuenta de que parecía adolecente esperando la hora para encontrarse con su amor.
En mi caso mi amor era la comida que esa mujer cocinaba. Y estaba ansioso, era cierto lo que dijo, no había almorzado, se me había ido el tiempo arreglando algunos documentos. Ahí sí pasaba rápido el tiempo. Estaba viendo el estúpido reloj cuando Jacob entró a mi oficina.
- A que no sabes que pasó. – puse los ojos en blanco. Era enserio, ahora mismo se le ocurría venir.
- No, no lo sé. – dije algo desesperado porque el reloj marcara las 5:00pm.
- Pues ayer conocí a una rubia, estaba buena la chica. Estuvimos hablando y luego de un rato la invite a mi departamento. Y qué crees. – suspire.
- Te bateó. – sonrió ampliamente.
- Ja, ya quisieras. Claro que aceptó y no sabes la noche que pasamos, por poco y hoy no llegó.
- Y lo que te hubiera llegado hubiera sido la carta de despido. – dije con una sonrisa muy grande.
- Hermano, necesitas des-estresarte. Ya sabes cual es la solución. Porque no salimos hoy eh. – dijo el muy sinvergüenza.
- Estoy casado recuerdas. – levanté mi mano izquierda señalando mi dedo y entonces empezó a babear.
- Obvio, quién se va a olvidar de la tremenda mujer con la que te casaste. – dijo con cara de pervertido. – Muchos aquí muriendo por tener algo como eso y tú que lo tienes en la palma de la mano, lo dejas ir.
- No volveré a tener esta conversación contigo. – dije exasperado buscando en que más concentrar mi atención.
- Bueno ya sabes que si tú no puedes con eso, aquí está tu mejor amigo para cubrirte. – me le quedé viendo muy molesto.
- A veces me das asco. – le dije serio, y él en vez de ofenderse estaba muy orgulloso de ello.
- Gracias, pero entonces qué, salimos está noche o qué.
- No, y no. Tengo planes. – dije muy serio.
- Llegar a encerrarte a tu habitación y lamentarte de tu vida no es un plan amigo.
- Mira cierra la boca quieres. – Ví el reloj en ese momento y ya marcaba las 4:48pm gracias al cielo.
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Insomnios En Tu Piel
Mystery / Thriller¿Qué sucede si juntas al resentimiento y a los fantasmas del pasado? Eres invitado a descubrir la respuesta en esta historia.