Insomnios En Tu Piel

Capítulo 1

En el mundo existen demasiados tipos de personas, altas, bajas, idiotas, inteligentes, delgadas, pachonchitas, hermosas físicamente, hermosas... por dentro, pero solo hay dos tipos de estos; los que ante algún mal acontecimiento solo se vuelven más fuertes o los que se dejan hundir.

Depende de tu capacidad mental el saber cual de estás opciones te conviene, claro cada quien sabe el sufrimiento que le puede causar tal hecho.

Por eso me sentía muy orgullosa de mi padre mientras veía que estaba jugando play con mi hermano menor. Él, por más que la vida lo ha golpeado jamás se ha rendido sino que se ha levantado más decidido a seguir luchando sin titubeo alguno. Él y mis hermanos son lo único que tengo y todo lo que soy se los debo a ellos, ya que ellos me motivan a no rendirme, a seguir adelante a pesar de los obstáculos.

-¿No te aburres de pensar demasiado? - ese era mi hermano Nat sacándome de mis pensamientos.
-¿No te aburres de molestar a los demás?
-Jajaja claro por eso a veces te cedo esa tarea. - termine por reír.

Nathaniel era el mayor, tenia 27 años.
Seguía yo, con 24 años.
Mi hermana Valentina con 21 años.
Y Jonah el más pequeño de la casa con tan solo 19 años.

Claro sintiéndome en el deber de aclarar que todos solteros.
Mi padre también entraba dentro de esa aclaración.

Era domingo y ese día lo tomábamos para estar juntos los cinco fuera del trabajo y de estudios. Estábamos en la sala y era de noche, ya solo quedaban las cajas de las pizzas que habíamos pedido.

-Saben, estuve pensando...
-¿No te dolió? - lo interrumpí, él me vio confundido.
-Qué cosa.
-Pensar. - mi padre me vio feo. Y mis hermanos comenzaron a reír. Mi padre carraspeó y levantó la voz mientras hablaba.
-Estuve pensando en que podríamos irnos de viaje la semana que viene. Val y yo podemos arreglar todo en la empresa, al igual que ustedes. - mi padre y sus ideas para pasar más tiempo juntos.

Él se sentía muy culpable porque mi madre nos hubiera abandonado; más nadie jamás lo juzgó. Y creía que si pasaba más tiempo con nosotros podría compensar el hecho de crecer sin una figura materna.

-Habla con nuestra jefa y luego nos avisas que dice. - Dijo Nat mientras Jonah asentía. Mi padre fijó su mirada en mí.

Funde una empresa hace unos años y mis dos hermanos, eran mis socios mayoritarios. Era una empresa que se encargaba de asesorar otras empresas, ya sean grandes o pequeñas en cuanto a sus áreas verdes.

Yo me había graduado de Ingeniera Ambiental y estaba por sacar la maestría. Nat era Ingeniero Industrial y ya estaba especializando. Mientras Jonah estaba a solo un año de ser Ingeniero en Mecatrónica.

Por otro lado mi padre tenia una empresa que llevaba el control de las finanzas de otras empresas. Era un honorable Licenciado en Contaduría Publica y Auditor, mi hermana siguió sus pasos. El año anterior se había graduado y mi padre tiro la casa por la ventana de lo feliz que estaba porque había cumplido con un sueño más. Así que ella trabajaba junto a mi padre, últimamente quería ampliar su rango así que estaba buscando nuevos socios.

Rodé los ojos y asentí. Odiaba que me hicieran eso. Resulta que una vez mi padre se le ocurrió uno de sus viajes, claro para entonces la empresa estaba muy ajetreada ya que teníamos mucho trabajo.

-No, no iremos a ningún viaje, estamos bajo mucha presión y ustedes lo saben muy bien. - había señalado a mis hermanos quienes estaban muy emocionados. Me imploraron un buen rato, luego se habían dado cuenta de que no cedería y tuvimos que posponer el viaje.

Así que desde entonces cada que mi padre aparecía con un viaje nuevo salían con "pregúntale a la jefa".

Mis hermanos se levantaron y comenzaron a celebrar.
Sonreí, no importa que pase, al final del día ellos van a estar ahí.

-Júpiter, parece que estás enamorada. Siempre estás sonriendo. - comentó Valeria. Me encogí de hombros.
-Puede...
Mi padre inmediatamente me vio como si de pura casualidad en ese momento me había salido un tercer ojo.
-¿Que tú qué?

Mientras mi padre estaba tratando de entender, mis hermanos morían de la risa. Me uní a ellos, yo tenia claros mis objetivos y enamorarme no era uno de ellos, no en este momento. Toda mi familia lo sabia, más bien todos estaban tan centrados en lo que era estudios o trabajo (o ambos), que enamorarse estaba en decimo plano.

-Pa, mi hermana primero se vuelve feminista antes de enamorarse en estos tiempos. - argumentó Jonah. Tan lindo, siempre decidiendo sobre mi.

Mi padre se recompuso luego de eso. Sonreí inconforme.

-Oh gracias por volverme feminista.
-Espera qué... - Claro Nat entendió el mensaje.
-Chuta... - Valentina dijo asombrada. Jonah se limitó a intentar descifrar el mensaje. Por otro lado mi padre estaba tan pálido.
-Claro que estoy enamorada.
-Es un idiota, aléjate. - ese era el Nat protector.
-Vaya manera de insultarme. - a ese paso no sabia si tenia que llevar a mi padre al hospital o al psiquiátrico.
-No entendí - sí, Jonah no era muy inteligente a veces. Nat comenzó a carcajearse y mi padre lo miró como si fuese un pecado.
-Nos diste un buen susto hermanita. - dijo Valentina mientras se unía a Nat. Mi padre estaba procesando todo.

Al parecer mi padre ya había entendido porque expulsó todo el aire que había estado reteniendo y se unió a Val y Nat para comenzar a reír como un loco. Yo solo miraba divertida la situación. Realmente creía que mi padre se había tomado todo muy a pecho, me parecía muy raro ya que a veces solíamos hacer esa clase de bromas y jamás había actuado así.

Luego de eso todos tomaron sus caminos hacia sus habitaciones, pero nos giramos inmediatamente ante lo que escuchamos.

-Aun no entiendo... - sí, ese era Jonah. Nos vimos a la cara y retomamos nuestros caminos mientras reíamos.

***

Gracias por darle una oportunidad a mi historia.

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