Si fuera tu Chica ; Hwang Hyunjin

24.

Se me hizo raro no encontrar ninguna nota en mi casillero esa mañana, por lo que me sentí un poco más aliviada en el transcurso de la primer clase, pero no duró mucho ya que cuando regresé a este para guardar un par de útiles, encontré otro papel.

"Cuatro: Ni siquiera le gustas de verdad, no te ilusiones porque sólo terminarás con el corazón roto, ya olvídalo.
PD: no creas que no te vi ayer, eres una miedosa."

Suspiré pesadamente y tomé los materiales necesarios para la siguiente clase. Escuché las voces de Felix y Changbin, que al parecer discutían otra vez, entonces escondí la nota entre mis libros.

—La naranja es mejor que la mandarina. —gruñó Changbin.

—No es cierto, la mandarina es más rica. —contradijo el australiano.

—¿Y ahora por qué pelean?

—Porque Changbin no quiere aceptar que la mandarina es mejor que la naranja.

Ay, estos dos y sus peleas sin sentido.

—¿No saben igual? —fruncí el entrecejo.

—¡No! —soltaron al unísono y me miraron raro.

—Cómo sea, el limón es mejor que cualquier cítrico. —guardé mis libros y cerré mi casillero.

—Tú estás peor... —musitó Felix.

—¿Yo estoy peor? Sus discusiones nunca tienen sentido. 

En mi defensa, yo estaba en lo cierto.

Gracias a que me topé con mis amigos en diferentes ocasiones, me sentí un poco más segura, tal vez Gaeul no se atrevería a hacerme algo si me veía con ellos y gracias al cielo también me encontré con Jeongin y Seungmin ya que compartíamos clase.

Te vi hablar otra vez con esa amiga de Gaeul, pero no pude acercarme ya que llevaba mucha prisa y a la hora del receso me tocó estar sola, pues no te encontré por ningún lado y supuse que estabas en clase.

—¡Aquí estás! —mi corazón se detuvo por un segundo y me resalté en mi lugar.

Ah, sólo eras tú, Hyunjin.

—¡Hyunjin! —llevé una mano a mi pecho.

—Perdón —me abrazaste por atrás—. No te he visto en todo el día y me alegra por fin encontrarte.

—Parece que con nuestros nuevos horarios es difícil vernos. —reí nerviosa mientras mi mirada corría por los alrededores.

—¿A quién buscas?

—A nadie.

—¿Has estado bien? ¿No has tenido ningún problema con nadie?

—No, ¿por qué la pregunta? —entrecerré los ojos.

¿Sabías algo?

—Por nada.

—Cómo digas. Me tengo que ir porque tengo una reunión con el comité ambiental.

Recogí mis cosas con rapidez y me levanté de mi lugar. No, no tenía ninguna reunión pero por el momento prefería verte a escondidas para eludir cualquier problema, aunque bueno, los problemas no parecían querer darme un respiro ya que recibí otra nota.

"Tres: Vamos por la mitad y si no quieres que algo pase, más vale que te vayas acostumbrando a no verlo más"

Muchas advertencias pero poco accionar ¿no? Si Gaeul realmente quería hacer algo ¿por qué no lo hacía y ya?

Pasaron dos días, dos días en los que no recibí ninguna nota y creí que Gaeul por fin se había resignado a dejarme en paz. Llegué a verte en más de una ocasión hablando con la misma chica de las veces anteriores y cada vez que tú y yo estábamos juntos me preguntabas si estaba bien o si algo me pasaba, ya que me veías más pendiente a mi alrededor que a ti, ¿ocultabas algo? De verdad me sentía más confundida que nunca.