39.

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A medida que pasaban los meses nuestra relación también avanzaba y cómo cualquier pareja teníamos nuestros problemas y desacuerdos, pero siempre procurábamos resolverlos al momento, no obstante, había algo en específico que noté en ti y es que cada vez que Gaeul estaba cerca, tú parecías estar al pendiente de lo que hacía, dándole miradas furtivas de las cuales creías que yo no me daba cuenta.

No te reclamé nada pues creí que yo estaba exagerando, pero descarté esa posibilidad al ver que ocurría con frecuencia y pese a que tu trato hacia mí no cambió, empecé a sentirme mal y supuse que aún sentías atracción por ella.

Ya que estábamos en los últimos días de clase, el instituto realizaba diferentes torneos y esa tarde el equipo de fútbol tenía una partido contra otro colegio; quedé en acuerdo de ir con Felix y Changbin y allí mismo nos encontramos con Seungmin y Jeongin. Nos sentamos en la parte más alta del graderío y tú apareciste diez minutos después que el partido dio inicio, por lo que Jeongin se movió de mi lado para cederte el puesto.

—Hola, cariño.

—Hola, Hyunjin. —sin apartar la mirada del juego en ningún momento, di un sorbo al té frío de durazno que Jeongin me compró.

—¿Estás enojada?

Sí y no. Resentida y confundida sería la descripción precisa de como me sentía.

—Estoy poniendo atención al juego.

—Oh, bueno. —deslizaste tu mano por sobre mi pierna hasta llegar a mi mano para entrelazarlas y ya no dijiste nada más durante el partido.

No quería que supieras la razón por la que estaba molesta, pues quería ver hasta donde podías llegar antes de decirme algo.

Me fijé que durante el partido te la pasaste mirando furtivamente hacia abajo y no precisamente por el juego, sino porque Gaeul estaba unas cuantas gradas al frente. Siendo presa de los celos, dejé ir tu mano y me miraste confundido por mi súbita acción pero preferí ignorarte y no decir nada al respecto, sólo continué prestando atención al juego.

¿No la mirabas a ella o sí? ¿No podías ser honesto y decirme lo que sentías? Un suspiro logró escapar de mis labios y bajé la mirada a mis manos, al parecer notaste mi estado.

—¿Te sientes bien?

—Estoy cansada.

—Oh vamos, hermosa, pones la misma excusa y siempre resulta ser de todo menos cansancio.

—Esta vez hablo en serio. —sonreí a medias.

—¿Segura? —me limité a asentir y al parecer me creíste—. Bueno, voy al baño, vuelvo en un rato. ¿No quieres algo en lo que regreso?

—Estoy bien, gracias.

Cuando te retiraste, Felix y Jeongin se acercaron para conversar conmigo acerca del partido, no era una gran fan de los deportes pero charlar con ellos siempre era entretenido, fuera cual cual fuera el tema, por lo menos los tenía a mi lado y me hacían reír.

Pasaron unos minutos y caí en cuenta de que estabas tardando en volver, recorrí el lugar con la mirada y noté que Gaeul tampoco estaba. La voz de los chicos se volvió nula al quedar absorta en mis pensamientos, pero lo dejé pasar por alto ya que no quería parecer una lunática y preocuparme de más.

Dijiste que confiabas en él.
Sí, pero me intrigaba saber en qué estabas tan ocupado. Las palabras de aquel molesto chico rondaron por mi cabeza y volví a preocuparme, ¿y si estabas con Gaeul?

El partido acabó y me despedí de los chicos, ya que tenían cosas que hacer y yo tenía una reunión con el comité ambiental, entonces pensé que sería buena idea preguntarte si podías quedarte conmigo.

Si fuera tu Chica ; Hwang Hyunjin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora