EllaEl chofer de Dani conducía en un silencio sepulcral, mientras nosotras en la parte de atrás íbamos inmersas en nuestros pensamientos, la música estaba a volumen bajo, así que no era suficiente como para reducir la tensión.
Habíamos logrado con éxito sobrevivir al día con todo y la clase de Historia incluida, ahora solo nos quedaba la fiesta de esta noche.
No pude quitar mi cara de estúpida después de mi breve conversación con Geneviève, Danielle pareció notarlo pronto y es obvio que ellas dos no se llevan del todo bien.
-¿Por qué esa carita, Vitale? -Pregunta subiendo ambas cejas totalmente seria.
-¿Qué cara? ¿La mía? -Contesto burlona a su pregunta.
-Ja ja ja, eres muy graciosa. -Dice con una mueca en su rostro. -Hablo en serio Ella, ¿Estás así por ella?
Danielle nunca se había comportado como una amiga celosa, todo lo contrario, por eso me sorprendía su extraña actitud cada vez que se mencionaba a Geneviève en alguna conversación o simplemente yo la observaba, realmente todo respecto a ella le molestaba.
-No tiene nada que ver con ella Danielle. -Respondo frunciendo el ceño. -¿Por qué de pronto todo lo relacionas con ella? en serio no te comprendo.
-Yo soy la que no te comprende Ella. -Dice mirando sus uñas en lo que prosigue con su regaño. -No sabes nada de Geneviève y ya veo que ya te llama mucho la atención.
-¿Y acaso eso te molesta? yo no veo el problema en que alguien me llame la atención. -Sus ojos de posan en mi unos segundos para luego poner la vista hacia el frente. -Dime, ¿Qué pasa contigo, Danielle?
Dani se queda completamente callada, sé que en su silencio se está replanteando que dirá, por eso se tarda tanto.
-Solo.. no quiero que salgas lastimada, este mundo es algo nuevo para ti Ella, pero no para mi, por eso debo cuidarte de ciertas cosas y ciertas personas. -Explica jalando una de sus uñas, hace eso cuando se pone nerviosa.
Okey, cada vez que toma su porte sobreprotector, no tengo como recriminarle algo, ni siquiera tuve una madre que se preocupara por mi estos últimos años de mi vida.
-Ya, lo siento si he sido pesada. -Dice haciendo un pequeño puchero.
-Eres la más pesada, pero aún así te adoro. -Respondo sacándole la lengua, ella rueda los ojos con una sonrisa, para luego darme un pequeño empujón. -Con Geneviève no ocurre nada, lo prometo.
-Eso espero. -Susurra desbloqueando su celular que acaba de vibrar. -Hunter pasará por nosotras a las 9.
-Significa que solo tenemos.. -Comienzo a decir lentamente.
-.. 5 horas para arreglarnos. -Termina la frase Danielle con cara de espanto.
El resto del camino lo pasamos platicando sobre la fiesta y lo que vamos a usar, me encargué en la mañana de empacar mi maquillaje y ropa decente para ingeniármelas con mi look.
-Llegamos señoritas. -Anuncia Derek, el chofer de Dani.
-Gracias Derek. -Dice Dani para luego bajarse del auto conmigo detrás de ella, claramente después de agradecerle a Derek también.
Entramos a la casa y subimos las escaleras hasta el segundo piso, donde se encuentra la habitación de Danielle, no pasan ni dos segundos para que yo me lance a su cama boca abajo, es tan esponjosa que básicamente me hundo en ella.
-Tengo sueeeño, Dani. -Hablo en medio de un bostezo, mientras tanto Dani ya se encuentra dentro de su closet revolviendo su ropa.
-¡Tu quisiste ir a esto Ella, así que te quiero bien despierta! -Exclama desde dentro, estoy comenzando a temer que su closet se la trague o algo parecido. -Debimos ir de compras, no tengo nada que usar.
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Tacto Dulzón
Teen FictionEn ese momento Geneviève se recriminaba de tantas formas a si misma, no podía lidiar con esto. ¿De qué le había servido ser perfecta toda su vida? ¿De qué le había servido hacer todo como se suponía que debía hacerlo? ¿De qué le había servido sa...