EllaComo odio los lunes.
El día había comenzado con la hermosa noticia de que mis hermanos no podían llevarme al instituto, así que tuve que despertar media hora antes para tomar el autobús, que claramente estaba repleto como todas las mañanas.
Así que hoy no estaba siendo mi mejor día debido a mi falta de sueño.
Las clases se pasaron rápido al menos, cada una más aburrida que la anterior, se acercaban exámenes importantes y la tensión en el aire era palpable, no tenía deseos de pensar ahora mismo en todo lo que tenía que estudiar, porque cálculo estaba acabando conmigo para variar.
-Hola Ella. -Saluda tímidamente Danielle.
-Hola Danielle. -Respondo de forma seca, si cree que mi enojo se esfumó así de rápido está muy equivocada. -¿Necesitas algo?
-Yo quería hablar contigo un momento. -Pide poniendo una mano sobre mi hombro.
-Nosotras no tenemos nada de que hablar. -Contesto apartándome con mis libros en mano.
-Ella, escúchame, yo no quiero que nuestra amistad termine por esto, ¡Por un capricho! -Exclama nerviosa. -Si esto es por Geneviève te juro que..
-.. No es un capricho Danielle, y tampoco es por Geneviève. -Respondo con calma, no veo necesidad de alterarme, eso no soluciona nada. -Se trata de que me mentiste, aún cuando sabías que no tolero las mentiras, y fueron meses de engaño.
-Tenía que protegerte de ella Ella, tú eres mi mejor amiga. -Dice con tono firme. -¿Has visto cómo actúa cuando se molesta? ¿Sabes que ella es violenta? ¿Crees que querría que te relaciones con alguien así?
-Esa tendría que ser una decisión mía Daniell, no tuya. -Digo de la misma forma. -Y para tu molestia, ella me importa y mucho.
-Lo siento ¿Si? tenía miedo de que ella pudiera lastimarte, no te quería cerca de ella ni que supieras lo que sucedió. -Explica intentando acercárseme nuevamente.
-Pues ahora yo no te quiero cerca de ella, y tampoco de mi. -Respondo viéndola a los ojos, los cuales además de recelo ocultan tristeza. -No me sigas presionando Danielle, necesito tiempo para pensar en todo lo que hiciste y dijiste.
Le doy la espalda y sigo caminando a mi próxima clase, reflexionando como además de Geneviève no tengo a nadie aquí, estoy completamente sola.
En ocasiones desearía jamás haber llegado a este lugar.
Al salir de mi última clase del día solo quiero cantar victoria, muero por llegar a mi casa y fundirme en mi cama con una inmensa barra de chocolate.
-Bru. -Dice a mis espaldas una voz que reconozco perfectamente como la de la señorita tres nombres. -Hola belle.
-Hola bonita. -Digo acercándome a ella, se ve hermosa, como siempre.
Aunque Geneviève es más alta que yo, no podía evitar percibirla frágil como una muñequita, ni ver más allá de aquellos ojos azules que me enloquecían.
-¿Qué tal el día? -Pregunta jugueteando con la trenza que adorna su largo cabello. -Para mi fue aburrido, sobretodo cálculo, esto de los exámenes me está volviendo loca lentamente.
-Tambien para mi. -Digo tomando una de sus inquietas manos. -Pero creo que gracias a ese lindo rostro mi día acaba de mejorar un poco.
-Ow, eres un dulce Ella. -Dice picando mi nariz.
-Solo contigo. -Respondo sintiendo el calor subir a mis mejillas.
Ella carraspea y se gira hacia otro lado, intentando disimular su rostro sonrojado.
![](https://img.wattpad.com/cover/284529822-288-k259606.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Tacto Dulzón
Novela JuvenilEn ese momento Geneviève se recriminaba de tantas formas a si misma, no podía lidiar con esto. ¿De qué le había servido ser perfecta toda su vida? ¿De qué le había servido hacer todo como se suponía que debía hacerlo? ¿De qué le había servido sa...