— ¿Ya preparaste tú cámara? — Preguntó él mientras apenas empacaba mi ropa. — ¿Cámara? — Pregunté yo. —Creo que no recuerdas que cuando algo me gusta mucho, disfruto el momento, no le tomo fotos— Volteé y seguí con lo mío.
—Vas a necesitar los recuerdos— Respondió. Volví a voltear. —Felix, si tanto necesitas la cámara, llévala tú, luego me la devuelves, yo puedo mostrar mi pasaporte para decir que si fuí a Corea— Aclaré con algo de sentido retórico.
—Está en una caja al lado del desastre de la computadora— Señalé de todos modos, ambos reímos un momento, pero nada fuera de lo común entre ambos.
— ¿Sabes si Chan ya tiene todo listo? — Preguntó luego de encontrar la caja. — ¿No era yo el último en empacar? — Lo miré. —Si no lo sabes tú menos yo— Empecé a mirar a todos lados, intentado buscar algo que ni yo sabía que era.
— ¿Quién era el del dinero? — Pregunté yo ahora. —Eras tú— Dijo instantáneamente. Y eso era lo que había olvidado.
— ¿Puedes hacerme un favor? — Pregunté, sin querer parecer muy obvio. — ¿Qué hago? — No había entendido que olvidé el dinero de nuestro hospedaje y comidas.
—Hay un caja exactamente igual a la de la cámara, tiene que estar por allí, la única diferencia es que tiene un poco de azul— Indiqué, al menos manteniéndolo ocupado.
Mientras, seguí empacando ropa. Escuché como tocaron la puerta, dejando pasar con una indicación.
—Ya tengo los tres tiquetes, vamos a dividirlos— Era Chan. —Recién hoy fué a buscarlos— Dijo desde detrás su hermana.
Yo paré un momento. —Bien, ¿Todos ya empacaron? — Pregunté por si las dudas. —Todos menos tú— Respondió Wendy viendo mi desorden.
Todos asintieron. —Los tiquetes— Le señalé a Chan. Me los entregó todos revueltos. Empecé a entregárselos a cada uno con su respectivo nombre.
— ¿Tienes el dinero? — Preguntó Wendy. Un segundo, dos segundos, no sabía que responder.
—No me digas que lo perdiste— Me miró decepcionada. —Ayudame acomodando la ropa y yo lo voy a buscar— Propuse, a lo que aceptó.
—Chan, tú busca por allá— Señalé la otra punta de mi habitación, no era muy probable que estuviera allí, pero era mejor que tenerlo parado viendo. —Es una caja como esa, pero con líneas o cosas azules— Señalé la caja de la cámara y me puse a buscar en la misma zona que Felix.
Un minuto había pasado ya desde que había empezado.
— ¿Por qué tú ropa interior es tan linda? — Preguntó Wendy. — ¿Quieres no decir eso y ponerme incómodo? — Dije mirándola y luego quitando la mirada rápidamente.
—La de Chan no es tan linda, y yo suelo regalarle, ni así— Siguió.
—Que suerte que tenemos años conociéndonos y eres la mayor de aquí— Solté.
— ¿Qué pasaría si fuera menor y no nos conociéramos desde hace tanto? — Preguntó con malas intenciones, pero ni volteé a verla.
Había visto algo, pero estaba muy al fondo, así que me arrodillé y me lancé, pero estaba muy detrás.
Sentí como alguien o algo se acercaba, pero estaba muy enfocado en ello. — ¿Ah? — Sentí muy cerca.
Estiré un poco más mi mano, pero luego sentí mucho peso encima de mi y terminé resbalando.
—No me respondiste… — Escuché en mi oreja, pero a la vez sentí un dolor muy grande en mi mano.
— ¡Ah! — Solté un pequeño grito de dolor. Ella se quitó de encima, dejándome ver la caja con dinero muy detrás, pero con aún mucho dolor.
ESTÁS LEYENDO
Nubes - Sana & Tú.
Fanfiction¿Alguna vez te has puesto a pensar en cómo serian las cosas si solo estuvieras con la persona que más quieres en el mundo? En el sentido literal de la palabra, este es el cuento que terminó siendo una espeluznante realidad.