Corazón Sin Rostro [+18] || PARTE I Y II ©

Extra 2

EXTRA 2

Sin remedio

IANN

25 de Mayo de 2020

Diez días...

Han pasado diez días desde que se marchó.

No sé qué mierda hacer.

La he llamado tantas veces, nunca coge el teléfono. Así que desde ayer, no la he llamado ni tampoco le he enviado ni un solo mensaje. No puedo ponerme así de obsesivo. Ella ya no quiere saber más de mí.

Pero el que esté incomunicado con ella no es el peor de mis problemas.

Miro la botella medio vacía y luego las que están vacías por completo. Nunca en mi vida había tomado tanto como lo he hecho hasta ahora. Incluso me cuesta pensar con claridad porque todo lo que quiero hacer es salir huyendo de todo lo que me agobia.

Estoy jodiendo mi vida en niveles impensables. Creía que atarme a una vida que no quería acabaría con todo. Pero esto... esto es el infierno.

No sé ni por qué sigo bebiendo, sabiendo que eso no me ayudará a olvidarla. Solo alivia la herida que dejó. Solo alivia el dolor que nos causé a los dos.

Pero es temporal, porque el licor no es un remedio.

No comprendía a mi propio padre cuando se sumía en el alcohol solo para intentar liberar la tensión que sentía al tener que confrontar sus problemas.

Todo ese tiempo que estuvo ausente, sumergido en el licor, lo había odiado tanto por desaparecer semanas enteras. Por preferir una maldita botella antes que yo. Por olvidar que tenía un hijo al que criar.

Y ahora... yo soy el que sigue ese patrón.

Mis amigos tienen más de una semana sin verme.

No saben ni dónde encontrarme. Porque no estoy ni en mi estudio ni en casa de mis padres.

Tampoco sé qué es lo que planeo hacer.

En realidad, ni siquiera estoy en San Francisco.

Estoy en Sacramento. Viviendo temporalmente en la casa de verano de mi abuelo. Aquí nadie podrá molestarme. Menos mal he conseguido mi objetivo, porque sinceramente no estoy para lidiar con nadie de mi círculo.

No quiero discutir más con nadie.

No tengo la energía para hacerlo. Y mucho menos me siento motivado para pelear a gritos con alguien que quiero.

Estoy encrucijado.

Estoy jodido. Por dentro y por fuera.

No puedo quitarme este pesar que presiona mi pecho. Todos mis pensamientos se tornan negativos y no hay otra cosa que no quiera hacer más que desconectarme de la realidad por un momento. ¿Acaso es tan difícil para el resto entenderlo?

No, ellos jamás lo entenderán.

Debería buscar ayuda, pero hace mucho desistí de esa idea porque entre más lo pensaba más postergaba la solución a mis problemas porque tenía tanto miedo de que algo fuera a fallar en el proceso.

Y sin embargo, algo terminó por fallar. Fue inevitable.

Si pudiera volver el tiempo hacia atrás, lo haría solo para hacer las cosas bien. Lo haría solo para no perder a Summer.

La batería de mi celular ha muerto. Lleva alrededor de cinco días intacto, no lo he cargado para nada y no pretendo hacerlo. No quiero que me localicen. La despensa está prácticamente vacía, no tengo más que sobres de sopa para preparar.