Accord [Chankwan/Omegaverse]

XVIII

El lenguaje de las flores era el más complicado a su parecer; cada flor, y cada color, tenía un significado, y a veces los significados exactos no lo convencían. Lo que Dino sentía por Seungkwan no podía ser descrito por las flores.

Camelia roja. Amor incondicional. Era la correcta. Sin embargo; El deseo y la sexualidad. Dino no tenía ningún deseo sexual. Lo que él deseaba para Seungkwan era diferente. La camelia blanca; Amor inocente. Podría ser la correcta, pero no, Seungkwan era algo más allá de ese amor efímero y puro.

Tulipanes: Amor sincero, enamoramiento, pasión... ¿pasión? ¿Qué tipo de pasión? Estaba descartado. Rosas. Bellezas, perfección. No, Dino estaba lejos de creer en que algo fuera plenamente perfecto. Descartadas. Margaritas. Amistad, no. Jazmín, sensualidad. No. Clavel, nobleza, amistad, amor... simplemente no. Amapola. No. Gardenia no. Orquídea. No.

Dino no encontraba la flor que le dejara en claro sus sentimientos a Seungkwan. Así que no compró ninguna para él.

Rosas rojas. Amor romántico y seducción. Observó el ramo de aquella persona y cuando la puerta se abrió apenas pudo ver a Seungkwan, ambos entraron en el departamento y cerraron la puerta. Dino solo suspiró asintiendo. Bien, miró sus manos vacías y despues miró el pasillo que llevaba hasta el departamento de Seungkwan. Si Dino pudiera describir sus sentimientos con flores entonces lo haría sin dudarlo. Pero desconocía tanto el significado de estas que prefería no intentar.

Caminó hasta la puerta quedándose a solo un par de pasos y llevó sus manos a su espalda. Sabía que Seungkwan estaría ocupado, una persona acababa de entrar y parecía interesado en el mono, así que Dino debía darles privacidad, dejar que ellos pudieran pasar su cita juntos y regresar al día siguiente. Aunque... Había estado una semana fuera arreglando las habitaciones para cada familia, no pudo pensar en Seungkwan. Si seguía esperando... No pasaría nada.

Dino podía irse y regresar luego, dejar a Seungkwan con su pareja. Podía dejarle un mensaje de texto, lo que sea. Sin embargo tocó la puerta.

Volvió a colocar las manos en su espalda y esperó dando un paso atrás. Escuchó algunos pasos, escuchó el perro de Seungkwan ladras y escuchó voces apagadas a través de la puerta, así que solo tomó aire y cuando por fin abrieron sonrió aflojando sus brazos. La rata de Seungkwan corrió a sus pies brincando sobre ellos.

—Kwannie...

Seungkwan lo miró con sorpresa y despues azotó la puerta en su rostro. Ah. Miró al suelo encontrándose con la rata blanca aun a sus pies, dando pequeños ladridos emocionados. La puerta volvió a abrirse y Seungkwan fue directo por su mascota, sin embargo Dino dio varios pasos atrás y el perro lo siguió.

—Bonie, ven lindo.— Lo llamó Seungkwan. La rata ladró para Dino así que él solo lo tomó en brazos recibiendo la lengua del animal. —¡Bonie!

—Estaré abajo.— Dijo con una pequeña sonrisa antes de darse la vuelta e irse junto con el perro.