Accord [Chankwan/Omegaverse]

X

¿a quién carajos le había estado llevando flores cada año?

—¡Mingyu!— Casi gritó cuando escuchó a Mingyu responder. No podía pensar, solo estaba concentrado en ese nombre y esa fecha, y esa firma. —¡Mingyu, por dios!

—¿Seungkwan?— La voz de Mingyu sonó a través del teléfono. —Si... Creo que no es el mejor momento, tengo un lobo aquí intentando convencer a mi hijo de ir a ver a su padre... su verdadero padre. ¿soy un padre de mentira? No, soy mamá, cierto.

—¡¿Dino está allí?!

—¿Cómo lo sabes?

—¡Déjame hablar con él!

Tardó un par de segundos y Seungkwan comenzó a mover el pie esperando una respuesta. Quería hablar con Dino, quería verlo y reclamarle porque se lo había dicho de esa forma... ¿si quiera se lo había dicho? No, no lo hizo, él solo dejó que Seungkwan lo buscara, esperó a que lo encontrara mientras que el maldito se iba en busca de Vernon. Claro que estaba enojado, Dino de nuevo esperaba que Seungkwan leyera su mente, o esperaba manipularlo, como siempre, y era tan estresante.

—¿Kwannie?— La voz suave de Dino dio justo en el blanco.

Odiaba eso. Le costaba mantenerse enojado cuando le hablaban de una forma dulce y cariñosa. En especial cuando Dino le hablaba así. No, tenía que estar centrado.

—Encontré lo que querías.— Dijo con una voz un poco más aguda e infantil. Como un puchero. Se maldijo. —¿de nuevo vas a usarme?

—¿Si es su firma?— El lobo mantuvo el tono suave.

—Si... eso creo... ¿Qué significa? Él... ¿alguien la falsificó? No, no puede ser, es su firma, lo recuerdo bien.

—Gracias, Kwannie. Te veré en casa.

Y Dino colgó, dejándolo con el corazón lleno con una sola frase "te veré en casa" como si vivieran juntos, como si de nuevo Dino fuera a llegar por las noches para acompañarlo. Como si aun tuvieran esa falsa imagen de una pareja feliz. Sin embargó, sintió la frase incompleta.

Lo odiaba mucho. Dio un largo suspiro dejándose caer en el sillón.

—Tardaré un poco en llegar.

—¿esta noche si vas a llegar?— Preguntó con molestia reacomodando la mesa. Ya no confiaba en las palabras de Dino, cada que planeaban algo juntos se arruinaba gracias "al trabajo"

Miró su ropa asegurándose de verse bien, aun si Dino no llegaba esa noche entonces se largaría con sus amigos a cualquier club nocturno para emborracharse y olvidarse de que alguien le gustaba tanto al punto de emborracharse por él. O bailaría con chicos desconocidos, buenos chicos que no lo dejarían plantado porque ellos ya estaban allí. O simplemente... o simplemente se quedaría en casa, esperando a Dino sabiendo que encontraría una forma de llegar a casa, aunque fueran solo un par de minutos.

—Llegaré.— Habló el lobo a través de la línea. —Te veré en casa. Te amo.

Te amo... Ah, era eso lo que faltaba.