-Narra Alain-
Llegamos al instituto y como siempre me despedí de Taylor para adentrarme al lugar. Las primeras horas de clase transcurrieron con normalidad, aburridísimas como siempre, se escuchó el timbre y salí detrás de todos.
En la cafetería me senté sola igual que siempre, todo estaba tranquilo hasta que las gemelas aparecieron frente a mí gritando mi nombre como si de ello dependieran sus vidas.
—Estas chicas están locas.— bufé para mi misma.
—Tú, pequeña sabandija. ¿Por qué te fuiste así sin avisar?— preguntó Danna.
—Lo siento chicas, pero no quería despertarlas y si no me daba prisa no llegaría a clases.
—No la molestes.-—le regañó su hermana.
—Muchas gracias por dejar que me quedara con ustedes anoche chicas.
—No agradezcas sabandija, nuestros padres nunca están tampoco y a nosotras nos da igual, eso no nos afecta.— dijo la peli negra.
—Veo que los padres de todos están ausentes y a nadie más que a mí parece afectarle.
—Pues, así es chica. El tiempo que no están lo compensan con dinero.— dijo Donna y las tres reímos.
—Largo.— escuché una voz detrás de mí.
Quise voltear para ver, pero su mano se posó sobre mi cuello impidiéndome girar.
—Nos vemos después del receso pequeña sabandija, no entres a clases, búscanos en la cancha de Fútbol.— fue lo último que dijo Danna para luego desaparecer con su hermana.
Mis ojos se abrieron como platos al darme cuenta de que quien estaba detrás de mi era Marco. ¿Cómo no reconocí su voz?
—¿Puedes dejar de comerme con la mirada?— dijo.
—No te estaba viendo, eres demasiado arrogante.
—No me conoces y ya me estás juzgando.
—Lo siento, hablo por lo que veo.— dije sin rodeo alguno.
—Pues si a esas vamos a jugar, eres condenadamente hermosa.— dijo él mientras una sonrisa juguetona se formaba en sus perfectos labios. Mis mejillas ardían y traté de salir de ese tranque.
—¿Por qué hiciste que se fueran las chicas? Nosotras estábamos en algo.
—Hablan demasiado esas dos.— dijo este sentándose justo al frente mío. —Y dime. ¿Tuviste problemas en casa al regresar.— continuó hablando él.
—No. Mis padres ni siquiera notaron que no dormí en casa, para mi sorpresa salieron de viaje hoy y no regresan hasta dentro de una semana.
—Bueno niña bonita, te di mi número para que me llamaras o por lo menos un texto.
—Dijiste que lo hiciera si necesitaba algo y estoy bien, no necesito nada.— le dije cruzándome los brazos.
—Auch, eso dolió. Ya me voy, te veo luego pequeña.
Se fue dejándome sola, lo miré con odio antes de que se fuera porque detesto que me llamen pequeña. Noté que al fin estaba sola y empecé a comer lo que había en mi plato.
—¿Alain verdad?
Levanté la vista para encontrarme con un rostro hermoso, asentí con la cabeza y él tomó asiento justo donde estaba Marco hace unos minutos.
—Disculpa. ¿Te conozco?— le pregunté.
—No, creo que no nos conocemos.— dijo extendiendo su mano. —Soy Terry Monzón. Tomé su mano sin decir nada.
—¿Estás saliendo con Marco?— preguntó el chico sin titubeos.
—¿Per... Perdón?— dije casi ahogándome con la comida.
—Es que los vi juntos y pensé que...
—No, no estoy saliendo con él, a penas lo conozco.— lo interrumpí antes de que pudiera terminar su expresión.
—Disculpa.
—No es nada. ¿A qué se debe tu pregunta? ¿De dónde me conoces si yo nunca te había visto?
—Pues tu rostro ha salido en las portadas de las mejores revistas del país, eres hija de los Ferrety Sotomayor, eres famosa.
—Comprendo. ¿Qué tiene eso que ver con Marco?
—Nada en realidad, es solo que me pareces una linda chica y...— se detuvo.
—¿Y?— le insistí para que siguiera.
—Pues, solo mantén los ojos abiertos con él, es un chico bastante problemático y todo lo que toca lo destruye.— dicho esto se marchó dejándome la palabra en los labios.
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Nota de la autora: Dedicado a RonnyMoya muchas gracias por tu Apoyo. Que lindo el destino que siempre pone personas que nos adviertan cuando estamos a punto de tropezar y que tercos somos nosotros que ignoramos la alerta y seguimos adentrándonos en el camino hacia nuestra destrucción. Veamos en qué sigue la historia de Alain. Los veo en el siguiente capítulo mis ojitos de koala.
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La vida de una adolescente ✓ [En edición]
Teen FictionTodos piensan que es fácil ser un adolescente, lo ven como una etapa más, un simple periodo de edad en la vida de todo ser humano. Pero nadie llega a pensar en el sinnúmero de situaciones por las que tienen que pasar a diario, las cosas a las que se...