•SPECIAL• [D.m]

Capítulo 1

"Familia Malfoy"

Narrador

-Ustedes son tan aburridos -se quejo Draco Malfoy poniendose detras de Venus para ver lo que ella estaba leyendo.

-No es mi culpa que la biblioteca de tu casa tenga buenos libros -se defendio la rubia pasando la hoja.

-Theo juguemos al Quiddich.

-No, gracias.

Venus Potter se estaba quedando en la casa de los Malfoy después de que Draco le mandara una carta a todo el grupo invitandolos a pasar lo que quedaba de las vacaciones con él, lastimosamente la Familia Zabini y los Parkinson estaban ocupados así que ni Blaise ni Pansy pudieron asistir. Obvio que no fue fácil convencer a sus tíos, aunque la llegada repentina de Narcissa Malfoy en la casa de sus tíos jugo un buen papel a la hora de dejarla ir; aunque obviamente Venus no queria irse sin Harry pero este se negaba a ir a la casa de su "enemigo".

La rubia tenia que admitir que estaba encantada de estar en la casa de los Malfoy, la casa era grande y con muchos lujos. Pero Lucius le daba un poco de miedo.

-Lee con nosotros -le ofrecio la rubia.

-Voy a tener todo un año en Hogwarts para leer.

-Bien, juguemos -dijo Theo levantandose y dejando libre su lugar- ¿Vienes? -preguntó ahora mirando a Venus.

-Si, no me voy a quedar sola.

Los tres salieron al inmenso patio a jugar Quiddich aunque Venus no quiso jugar, realmente no era mala de hecho era muy buena, pero eso preferia dejárselo a Harry. Ella era la inteligente. El chico Nott no tuvo la misma suerte, ya que a el no le gustaba jugar, pero Draco insistió tanto que aceptó por cansancio.

Venus habia llevado con ella el libro que antes estaba leyendo, se trataba sobre artes oscuras, en realidad casi toda la biblioteca Malfoy tenia libros sobre eso, pero este era el más interesante de todos, se trataba sobre la forma de conseguir la inmortalidad, aunque estaba bastante arruinado: la tapa se salia y faltaban algunas hojas.

La rubia estaba tan concentrada que prácticamente salto de su lugar al escuchar ser llamada. Al dar vuelta se encontro con Narcissa Malfoy quien le regala un sonrisa sincera.

-Venus, querida, pense que quizás te gustaría tomar el té y charlar un poco conmigo.

-Por supuesto que si, señora Malfoy -dijo la rubia cerrando delicadamente el libro, lo cual no paso desapercibido por Narcissa.

La chica Potter y la madre de su mejor amigo se encaminaron a unas mesitas un poco más lejos de donde antes estaban, el té ya estaba servido y también habia bocadillos.

Si Venus tenia que ser sincera, prefería por mucho a Narcissa antes que a Lucius, ella se mostraba más tranquila y se notaba que sus sonrisas eran verdaderas.