Lo primero que hago en cuanto Mia se va es volver a mirar el anuncio del concurso de escritura del campus. Tiene una temática de terror, y me pregunto si es eso lo que le preocupa o si se habrá presentado alguna vez al concurso.
Reviso la página de la universidad y los ganadores de los concursos de escritura de otros años y Mia no aparece por ningún lado. Quizás sea verdad y nunca se haya presentado pero por la forma en la que miraba el tablón de anuncios estaba claro el interés que tenía.
Además, si estudia escritura creativa será por algo, querrá que en algún momento sus obras salgan a la luz. No he leído nada que haya escrito, y mi curiosidad solo va en aumento. A una parte de mí le gustaría que se lo enseñara en algún momento y si escribe algo parecido a lo que lee definitivamente quiero leerlo.
Me la imagino delante de su portátil tecleando a toda velocidad mientras describe una escena subida de tono e inmediatamente mis pensamientos se van a nuestra sesión de estudio.
Cómo su boca torturaba mi cuello cada vez más y luego yo terminé haciendo lo mismo.
Cómo al apartarme y mirarla por unos segundos me fijé en el esfuerzo que estaba haciendo por no abrir las piernas.
Y cómo tuve que desahogarme esa misma noche pensando en ella y en su maldita boca.
Sé que me dijo que no hacía falta que la besara pero después de que pasara eso, de que fuera ella la que prácticamente se abalanzó sobre mí me niego a pensar que las reglas de nuestro trato no han cambiado. Desde que se ha marchado por el pasillo en mi mente se ha iniciado una cuenta atrás con el tiempo que falta para volver a verla y tener una excusa para tenerla cerca de mí otra vez.
Aún no se explicar lo que me está pasando con Mia pero es una mezcla entre una enorme curiosidad por descifrarla y mis ganas en aumento de que su boca roce mi piel de nuevo.
Y será mejor que me vaya a alguna parte a tomar el aire o de lo contrario acabaré esperándola en el pasillo y parecería un acosador.
Mando un mensaje a Kyle a ver si ya ha salido de clase, y además su facultad está cerca así que no tardaría mucho en ir hasta allí.
Kyle: voy a la cafetería, que he salido hace nada de clase, te vienes?
Caleb: ok
te veo ahíKyle: tío tengo un hambre… y hoy hay hamburguesas de las buenas, de las de MUCHO queso
Caleb: voy volando
espero que no estés jugando con mis sentimientosKyle: yo nunca bromeo con el queso
Es cierto, creo que solo hay una cosa que le guste a Kyle casi tanto como la fotografía y es el queso. Incluso para su cumpleaños siempre pide tarta de queso.
Mi móvil vibra otra vez mientras voy de camino a la cafetería y me pienso que es otro mensaje de Kyle, pero no, es Duke.
Duke: este finde fiesta, no?
La semana acaba de empezar y aún no hemos ni jugado el partido y ya está pensando en la fiesta. Aunque en el caso de Duke esa frase podría tenerla tatuada en la frente. De hecho, me extraña que no tenga ya un tatuaje con algo parecido. Resoplo, aunque quizás podría usar a Mia de excusa y decir que voy a estar con ella en vez de ir a la fiesta. Además, era una de las razones por las que nuestro trato me vendría de perlas.
Caleb: primero hay que ganar el partido
Duke: eso está claro
A veces la seguridad que tiene Duke en todo lo que hace es más irritante que envidiable. Para mí, lo único que garantizaría que ganemos es entrenar duro a diario y ni siquiera eso es suficiente.
Cuando llego a la cafetería me olvido del móvil y de la fiesta de este fin de semana para concentrarme en mi hamburguesa con queso y mi amigo.
-Podemos quedar luego en las pistas del campus para practicar un poco. Sé que estás agobiado por el partido del viernes.
-¿Tanto se me nota?- Digo entre risas.
-Bueno, siempre estás agobiado pero en el entrenamiento casi te tienen que decir que te sientes cinco minutos. Caleb… te conozco, y se cuándo estás cerca de tener un ataque de ansiedad y espero que no te de uno en el partido. – Me mira a los ojos con su mirada tranquilizadora a la que añade una sonrisa. – Si quieres seguir entrenando lo entiendo, pero no lo hagas solo, ¿vale?
Me tiene calado. Kyle y yo nos conocimos cuando fuimos a ver la universidad en primavera y yo no tenía ni idea de a cuál ir. El programa deportivo de Los Ángeles es una pasada, pero seguía sin tener las cosas claras. Pedí varios folletos y encontré Golden Oaks, sencilla, sin presiones y con unas canchas de baloncesto que no tenían nada que envidiar a otras de la costa oeste. Me pasé un buen rato lanzando tiros yo solo en las pistas exteriores y cuando el balón se me fue algo lejos, vi a Kyle que aprovechó la situación para marcarse un triple. A él ya le habían admitido en Golden Oaks y estaba bastante tranquilo, aunque en general casi nunca lo he visto alterado por algo.
-Gracias. – Le digo.
Los dos nos terminamos nuestras hamburguesas hablando de posibles estrategias para el partido y Kyle insiste en que no me fuerce demasiado. Cuando acaban los partidos suelo necesitar una ducha o un baño helado porque me paso todo el partido en tensión, y más de una vez las agujetas tochas han sido por culpa de eso. Un masaje tampoco me vendría mal, la verdad. No se ha dado la ocasión de que alguien me lo de pero en estos momentos tengo una clara candidata a la que dejaría que pasara sus manos por mi cuerpo todo lo que quisiera.
Y casi como si la hubiese invocado, entra por la puerta de la cafetería.
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Como ya os dije, hoy toca actualización doble. Espero que os gusten mucho estos dos capítulos. Como la acción va muy seguida he decidido subirlos el mismo día. Dejadme un voto ⭐ si os ha gustado el capítulo y comentadme qué os ha parecido, ya sabéis que me ayudaría un montón. Seguid leyendo para saber qué pasa en la cafetería 👀
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Miénteme Hoy (Golden Oaks #1) [+18] [BORRADOR] ✔️
RomanceUn jugador de baloncesto y una escritora tendrán que fingir estar liados después de un encontronazo en una fiesta. Solo hay una norma: no van a besarse. ~~~ A Mia le encanta salir de fiesta por el campus con sus amigas, aunque no termina de desmel...