Tercer libro saga ¨El alfa, El beta y La cazadora¨
Los mellizos Ethan y Theo a días de su primera transformación, ansiosos por encontrar a su alma gemela, cuestionándose si tendrán que compartirla como sus padres o la diosa les tendrá una sorpresa.
El tiempo pasaba y el castillo tomaba forma, varios pactos fueron firmados con Ethan como juez supremo, la justicia al mundo sobrenatural finalmente había llegado.
Ariel y Rose disfrutaban su embarazo como podían, los mellizos eran sobreprotectores en demasía, iguales a sus padres, volviéndolas locas de desesperación por unos minutos de paz. En la manada la joven luna se encontraba en las mismas, sus machos eran realmente insoportables, tras varias amenazas con castrarlos lograba una poca de paz y con la ayuda de sus leales suegras lograba evadirlos.
Dta- Si me ayudan quisiera ir a la ciudad, tal vez lleve a Rose y Ariel para que descansen un poco, tal vez un día en el spa nos vendría bien- suspiro hacia sus suegras.
Hil- Tienes razón pequeña, llamare a Ariel y le avisare que pasaremos por ellas- dijo sonriendo.
Dia- En veinte días llegaran los dos primeros pequeños y el pequeño alfa de Ethan un poco mas- estaba emocionada -hace tanto que no tenemos un pequeño en la casa.- Dakota sonrió emocionada mientras acariciaba suavemente su vientre.
Hil- Listo, las chicas nos esperan ansiosas y MUY agradecidas- dijo divertida -creo que tus hijos- señalo a su nuera -realmente salieron iguales de protectores que sus padres.
Dia- Y esos salieron a sus padres también.
Hil- Ash ni me lo recuerdes, Jef era insoportable- sonrió con tristeza -aunque solo lo viví en dos ocasiones, a veces extraño su comportamiento- Dakota la abrazo consoladoramente y ella sonrió -bueno vamos o tus machos se darán cuenta.
Ya en la cuidad las cinco mujeres fueron directo al spa, al llegar en el auto bastante lujoso de Hilary llamaron la atención de varias personas enfocadas en quienes llegaban al lujoso spa hotel.
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Auto de Hilary
Tras pasar todo la mañana relajándose, Dakota fue con sus nueras al shopping a ver ropa para sus pequeños por nacer, sin percatarse de que eran seguidas por cinco hombres hasta que Nala advirtió a Rose.
Ros- Tía Dakota- señalando disimuladamente a quienes las seguían -Nala dice que nos están vigilando.
Dta- No parecen criaturas sobrenaturales - se coloco sus lentes de sol para cambiar a su visión especial y no vio mas que simples humanos -tranquilas, no son peligrosos, nada que ninguna de las tres no pueda solucionar- y sonrió.
Tras varias compras, volvieron por las mujeres mayores que ya estaban saliendo del auto para ayudarlas pero antes que pudieran siquiera subir, fueron obligadas a entrar en una camioneta negra y encerradas, Hilary vio como las forzaron a subir e inmediatamente llamo a Andrew, tomando rápidamente lugar en el volante de su auto para comenzar a seguirlos con Diana a su lado. No estaba para nada preocupada por su nuera y sus nietas políticas, si no por esos pobres humanos que se habían atrevido a tocarlas.... a las tres.... preñadas de uno de los alfas mas poderosos, posesivos e irracionales, de otro alfa y no cualquiera, nada mas que el alfa rey y la otra del beta real.... o si.... pobres humanitos, que terrible error habían cometido, sin mencionar que tal vez se llevarían la paliza del siglo de parte de su nuera.
