MI PERFECTA RENDICIÓN © (1) (¡Completa!)✔

EPILOGO PARTE 2

Yo solo podía observar su hermoso trasero.

Ay como lo extrañe.

Sería el mejor cumpleaños de la vida.

La pegue contra mí y comenzamos a bailar pegados, Lee movía sus caderas contra las mías  sin importarle los demás, lo estaba disfrutando y me encantaba eso, mis manos estaban sobre su cintura apretándola.

Le bese el cuello.

Ahora si puedes.

Sonreí ante el recuerdo de su primera vez en el bar hace unos meses, la primera vez que la bese, — Te miras realmente hermosa, cosita. — susurré y la sentí estremecerse.

Lee se dio la vuelta y paso las manos por mi cuello mientras yo recorría su espalda y trasero, sentí ese escalofrío en mi cuerpo a tenerla bajo mi piel, era la gloria estar así con ella.

Nos habíamos tomado varios tragos y ya estábamos un poco entonados, pero seguimos conscientes.

Mi erección se empezó a formar cada vez más cuando sentía las nalgas de mi prometida contra él, ella me estaba provocando y estaba muy consiente de ello, quería hacerme caer con sus encantos.

— Estoy caliente — susurró con voz ronca en mi oído.

Ay mamita.

Apreté su cintura y jadeó al yo restregarme contra ella — Yo también — gruñí.

No soporte.

A lo lejos vi a Laura y Lukyan hablando, no, no estaban hablado se están comiendo la boca esos dos.

Lee lo noto y sonrío feliz al verlos— Solo es por darle celos por lo que paso, pero ya los veo bien — me susurró divertida.

>> ¿Deberíamos dejarlos no crees? — ella sonrío con maldad y me jalo hacía la salida del antro, la música ya se escuchaba a lo lejos y Lee estaba carcajadas las cuales me contagiaba al verla asi.

Se pego a mi y empezó a besarme el cuello, dando pequeñas mordidas

— Lee ahora estamos en vía publica — susurré — vayamos a casa cariño — la jale hacía el coche.

Ella bajo sus manos y sobo por encima de mi erección y me siguió besando.

Yo no podía contra eso.

Yo no puedo negarme a eso.

Me jalo hacía atrás del antro, donde no había gente y había varios arboles.

Ay no me digas.

Diablos me calenté más.

Me empujo contra un árbol y mi espalda quedo pegada al tronco, ella empezó a besarme el cuello, las lambidas no me permitían pensar con claridad solo en mi mente estaba ella, Lee desabrocho más mi camisa para tocar con sus manos la piel de mi torso desnudo, sus manos recorrían por todo mi cuerpo sin cesar, ella sabía como hacerme caer a sus pies y lo estaba logrando.

Gruñí en contestación y tome una de su pierna y la enrolle a mi cintura, deslice mi mano sobre su muslo hasta llegas a su sexo.

Espera ¿Por qué no tiene bragas?

— ¿Por qué no tienes bragas? — pregunte entre el beso mientras ella seguía bajando sus manos por mi torso para desabrochar mi pantalón y sacar mi miembro para tocarlo.

— Porque creí que sería más caliente... — susurró con la respiración agitada.

— ¡Joder claro que si! Es demasiado caliente...— jadeé cuando sentí su mano en mi miembro subir y bajar, rodee los ojos al sentirla, su risita malévola se escucho y sabía perfectamente que ella lo estaba disfrutando.