Poco a poco.
Arleed Jones.
Sentía las manos de Mason en mi cuerpo, tocando mis partes y riéndose de mi.
Me dolía porque era brusco, sus dedos me tocaban, pero yo no quería, yo lloraba de lo horrible que sentía.
Sentía que no podía respirar, mi entorno se cerraba como si fuera claustrofobica, no podía respirar.
—Lee, tranquila soy yo Axel — escuchaba su voz a lo lejos. — nadie te hace daño cosita, no lo haré ni nadie lo hará.
Mis ojos empezaron a sentir la luz, una luz muy fuerte, mis piernas dolían, no se donde estaba, sentía el sudor por todo mi cuerpo, mire hacía un lado y Axel me miraba preocupado.
>> Soy yo, lo soy, soy real, volví por ti. — susurró tomando mi mano.
Lo hizo.
— Lo hiciste — murmuré, con lágrimas en los ojos, le abrace con todas las fuerzas que tenía y no me separe, encaje mi cara en su cuello llorando. —no te vayas — dije en susurró.
— Jamás lo haré cosita. — contesto suavemente mientras dejaba un beso en mi cabello.
Me acurruque y nos quedamos así, no me moví tampoco pensé en más solo me quede en sus brazos, aliviando el dolor que sentía, me sentía en casa cuando tenía los brazos de Axel en mí.
— Cosita ¿Recuerda lo que paso? — me pregunto suavemente.
Asentí, el me abrazo más, pero nadie dijo nada más.
— Movimos todo San Francisco por ti cosita.— dijo divertido.
Sonreí y levante mi rostro para mirarlo — Te amo, Axel. — susurré.
El sonrío — Te amo, cosita. — murmuro sobre mis labios pero me aleje, no quería, me sentía sucia.
Él lo noto pero no me dijo nada, solo sonrío cálidamente.
Llego la doctora y me reviso, me dijo que mañana podía irme y que me daría unos medicamentos.
Después de eso la doctora nos dejo, pero entraron mis suegros.
— Mi bella Lee no sabes lo preocupados que estábamos, que bueno que esos hijos de pu...
— Mamá — interrumpió Ax.
— Esos cabrones no te hicieron nada, — me abrazo y le correspondí el abrazo, — Te quiero mucho hija por favor no nos dejes, te buscamos en todas partes y más Axel que parecía loco por que no comió nada y ni durmió. — me dijo más bajito.
—Escuche mamá y no le hagas caso Cosita — me miró y sonreí.
— Yo le pondré sus nalgadas — dije seria y Mónica solo me guiño el ojo.
Kilian se acerco a mi y me dio un abrazo y beso mi frente — Me asustare mucho pequeña Lee, que bueno que estás bien, de verdad no se que hubiera pasado. Te quiero mucho hija — los ojos de mi suegro se cristalizaron y solo carraspeo, yo sonreí y asentí.
Axel no se movió en ningún momento de mi lado, a las horas mis suegros se fueron a descansar pero Axel no me dejo.
Tocaron la puerta y a lo segundos se abrió, era un chico muy guapo, y vaya que digo guapo.
— Ya estas despierta zolovka, soy Lukyan — se presento con su acento ruso y estirando la mano — Mejor amigo de tu novio.
Con que este es el ruso.
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MI PERFECTA RENDICIÓN © (1) (¡Completa!)✔
Novela JuvenilArleed Jones ha vivido en la sombra de su tumultuosa relación con su madre y los recuerdos fragmentados de un pasado trágico. Lejos de la diversión de fiestas y excesos, su vida giró en torno a un atractivo vecino y mejor amigo Axel Miller, aunque é...