EXTRA II

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*Lee la nota de la autora al final del capituló*

Nuestro Primer San Valentín.

Axel Miller.

Mi mano estallo en la piel de mi cosita, creando un estruendo y un jadeo saliendo de sus labios.

— ¡Auch! — se quejó.

Amase su nalga debajo de la falda — Si te quejas te doy más fuerte, me las debías ¿Sabías?— susurré delineando con mi yemas la piel de su cintura, estaba acostaba boca abajo sobre mis piernas con sus pompas de fuera.

— ¡AUCH! — exageró sonriendo de forma pícara.

Quiere que le des...

Créeme que si le quiero dar y duro.

Sonreí y negué, le di otra nalgada haciendo que jadeara y mordiera su labio, eso me puso duro al instante.

— ¿Sabes que día es hoy? — preguntó.

— Si, lunes.

Ella bufo, su rostro cambio de estar bien a apretar los labios.

Se que día es hoy, es San Valentín, nuestro primer San Valentín.

— Si, pero que otro día importante es...

— No lo se — me encogí lo hombros, su cara se transformó en enojo y se levantó.

— Ire a darme una ducha. — se paro enojada y me dejo ahí todo duro.

Ese era mi propósito hacerla creer que no tengo nada planeado cuando es todo lo contrario.

—¿ Me dejaras duro? — pregunté burlón mientras ella subía las escaleras.

— Si

Subió molesta, acomode mi erección y saqué mi celular marcando a mi papá.

¿Qué pasa?

— ¿Está todo listo?

— Sí, hijo.

— Gracias, papá.

— Espero la pasen bien. Suerte hijo mío.

— Gracias, papá.

Sí, tenía todo planeado, déjame hacer un repaso mental, las maletas están listas, la cámara también, los lugares claro que sí, solo me falta mi cosita.

Genial.

Subí las escaleras, ya teníamos unos buenos meses que estábamos bien instalados en la casa de mis padres, ellos no las dejaron y bueno creo que esta bien para nosotros, hasta que ella este lista para irse o cómo guste.

Camine a nuestra habitación, tenía que meterme en el papel, entre y ella estaba acomodando la ropa, tenía el ceño fruncido y de cierta manera se miraba triste también, no quería verla así, pero yo sabía que al final del día estaría muy feliz, tenia todo planeado.

— Cosi, tengo una reunión en la empresa de papá ¿Me acompañas? — me recargué en el umbral de la puerta.

— No.

Me acerqué y mire que guardo rápido unas fotos.

Antes de que cumpliera su objetivo, tome sus manos y las mire.

Eran fotos con su mamá, inmediatamente mire su rostro y no era más que tristeza, mis brazos la rodearon con calidez y le de brinde un beso en su cabeza.

— No es tu culpa, nada de lo que paso, cosita. — acaricie su mejilla y gire su rostro para verla.

— Lo sé — sonrío de lado — sólo la extraño porque al final siempre será mi madre, aunque pasara lo que pasara.

MI PERFECTA RENDICIÓN © (1) (¡Completa!)✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora