RED / Kurtaxl

Capítulo 25

—Kurt, bebé, me alegra que estés bien, perdona por haberme desmayado, te dejé solo, yo-

Comenzó Izzy diciendo con alivio pero el rubio lo interrumpió.

—No me pidas disculpas por eso, Izzy, no es tu culpa haberte golpeado. —dijo mientra tomaba su mano para acariciar con su dedo pulgar. —Es mi culpa por no haber podido controlar el auto.

El pelinegro negó mientras apretaba su mano a la suya.

—No, no, no fue tu culpa, amor, fue un accidente pero estamos bien.

Axl se sentía raro escuchando cuan empalagoso era el tucancito llamando "bebé" y "amor" a Kurt, ¿será que el también tenía un apodo para Izzy? ¿O solo "Izzy"? Permaneció de pie junto a la puerta en silencio observando la cursi escena prometiendose que nunca sería así de chicle.

Izzy el chico malote homofobico con pasado homosexual fallido siendo bien gay de nuevo, que cliché.

Soltó una risa que al parecer sacó de su burbuja de corazones y unicornios al par aquel y al parecer hizo al tucancito darse cuenta de su presencia. Cuando sus miradas chocaron, levantó una ceja mirándolo con una sonrisa burlona que hizo al contrario fruncir el ceño molesto.

Ver a tu novio con el chico que le gusta (o gustaba) no debía ser algo lindo de presenciar.

—¿Qué haces tu aquí?

Axl se acercó. —Visitandote, mentiroso.

Kurt apretó los labios y antes de que su novio pudiera decir algo, tomó la palabra.

—Izzy, tengo que decirte algo.

Izzy sintió su piel erizarse. Había oído que muchas rupturas comenzaron así. Tragó saliva.

—¿Algo de qué?

—Algo de que eres un mentiroso. —dijo Axl. Izzy lo miró pero de nuevo Kurt tomó la palabra.

—Mis padres los culpan a ambos sobre este accidente y me están obligando a no verlos ni hablarles nunca más o me llevarán a Chicago para siempre.

El pelinegro lo miró con la boca abierta.

—¿Qué? No, pero tu fuiste quien quiso hacerlo, Kurt, no pueden alejarte de mi, eres mi novio. —una idea brilló en su mente. —Escapemos juntos.

Kurt se quedó perplejo mientras que el pelirrojo soltó una carcajada.

—Primero es un mentiroso y ahora un secuestrador, no si, de mal en peor. —exclamó el pelirrojo mientras seguía riendo.

Izzy lo miró mal y después a su novio que lo miraba con una pequeña sonrisa. Le sonrió de vuelta pero claro que no esperaba lo que venía a continuación.

—Izzy eres un maldito. —dijo Kurt en voz baja pero audible para ambos chicos. Axl dejó de reír quedandose pasmado igual que el pelinegro.

—¿Qué?

Kurt suspiró y contó hasta cinco resistiendo las ganas de decirle hasta lo que no. Tenía que ser claro pero suave, después de todo realmente se sentía querido por el pelinegro.

—Me mentiste, Jeffrey, le prometiste a ese tipo, Freddy y al otro, dinero para hacerme creer que ese contrato era real. Me dejaste parado como un maldito tonto crédulo e ingenuo solo porque querías ser mi novio. ¿No pudiste solo pedirmelo?

Izzy sintió como un balde de agua caía sobre sus hombros. Puta madre.

La habitación permaneció en silencio mientras el rubio esperaba una explicación, una disculpa o lo que fuera del otro pero este solo bajó la mirada y soltó su mano. Debe admitir que se sintió vacío cuando su tacto se alejó.

—Lo siento, Kurt.

—¿Por qué me mentiste así? Pudiste solo haberme dicho algo.

Isbell alzó los hombros.

—No lo sé, yo- simplemente te dije eso. —alzó su vista y miró derrotado al rubio. —No puedo darte una explicación, amor, solo te pido una enorme disculpa, en verdad te quiero, Kurt.

Kurt asintió. —Te disculpo, Izzy pero aún así... Terminamos.

Isbell abrió grande sus ojos y negó repetidamente. —No, no termines conmigo, por favor, Kurt, te juro que haré lo que me pidas pero no me termines.

Axl soltó una risa. —Rogón.

Izzy lo miró mal. —¿Quieres callarte por un minuto, imbécil?

Este rodó los ojos. —Tu eres el imbécil, ¿enserio creíste que tu mentira duraría siempre?

El pelinegro entornó los ojos hacia el.

—Tu fuiste quien le dijo a Kurt, ¿verdad?, ¿cómo supiste?

—Te dije que Erin me lo dijo y después Kurt me comentó sobre ese "contrato" que no suena más tonto porque no eres más alto y Freddy me lo confirmó. —Izzy lo miró frustrado. —Dijiste que lo averiguara y lo hice y ¿sabes qué es lo mejor? No puedes amenzarme con contarle a Kurt sobre Erin porque ya lo hice. Quedé bien y tu mal, jaque mate, emo manipulador.

Terminó con una sonrisa triunfadora al mismo tiempo que pasó el brazo sobre los hombros de Cobain para demostrar su truco.
Izzy apretó su mandíbula causándole aún más dolor del que ya sentía en su cuello.

—Escucha, Izzy, te perdono. —dijo Kurt volvió a tomar su mano. —Yo también te quiero pero no quiero estar con alguien que tiene que manipularme y sobornar a otros para estar conmigo, no está bien y el que queda como crédulo soy yo. Además mi madre me obligó a cortar contigo, no solo me alejaré de Axl, también de ti, no quiero ir a Chicago, mi vida está aquí pero esa es la condición para permitirme quedarme.

Izzy con la mirada baja asintió comprendiendo. Ese era el fin de su relación y fue él mismo quien la jodió por no haber querido hacer las cosas bien pero el desespero y el ver como Kurt aceptó un almuerzo y una cena con Axl así como si nada lo había llenado de inseguridad, su única opción fue esa mentira para ganarle al pelirrojo.

Su pecho dolía y quería llorar. Soltó la mano del rubio.

—¿Pueden irse? Quiero... Pensar.

Axl rodó sus ojos y de inmediato salió de la habitación, no quería ver al tucancito iniciar con su papel de víctima.

Kurt con timidez y cuidado de ambos collarines, se acercó y dejó un último beso en los labios del pelinegro. Este se encargó de que fuera más que un solo roce y terminó profundizando el beso en busca de transmitirle al rubio cuanto lo quería.

Al separarse ambos se sentían acalorados con sus respiraciones irregulares y corazones latiendo muy rápido.

—¿Podemos vernos de vez en cuando? —preguntó Jeffrey en un último intento.

Kurt suspiró. Estaba con la cabeza hecha vueltas por el beso que solo asintió y con lentitud giró y caminó hasta salir de la habitación.