𝐇𝐞𝐚𝐯𝐞𝐧𝐥𝐲 | ✔

𝐗𝐗𝐕

Para el siguiente Lunes, Lía ya estaba frente al espejo en su habitación en Hogwarts arreglándose para ir a su primera clase del día.

Había pasado una gran parte de su semana de "descanso" en el departamento de Harry, con el y con Draco y tenía que admitirlo que tener los flashback de esos días provocan un escalofrió por todo su cuerpo.

Después de terminar de cubrir aquellas inofensivas mordidas que habían dejado por su cuerpo, salió de su habitación topándose con su mejor amiga en el pasillo.

—¡Volviste!. —se lanzó a sus brazos. — Te extrañe infiernos.

—Y yo a ti. —rio abrazándola. — ¿Qué ha pasado esta semana?

—Nada importante. — se encogió de hombros. — Scorpius nos contó lo que paso, ¿Cómo te sientes?

—Mucho mejor. —sonrió. — Era obvio que lo que necesitaba era un buen descanso. —su sonrisa se agrando.

—De acuerdo. —frunció el ceño. —¿Vamos a desayunar?

—Claro. —asintió.

Ambas amigas bajaron las escaleras, y casi de inmediato las miradas de los demás estudiantes cayeron sobre de ella.

Murmuraban y la señalaban con la mirada de manera extraña.

—¿Qué les pasa a todos? —murmuro Lía cerca de su amiga.

—No tengo la menor idea. — se encogió de hombros. — Todos supieron que te desmayaste, quizá es eso. —Lía asintió no muy convencida.

Salieron de la sala común de Hufflepuff y comenzaron a caminar por los pasillos y la acción de sus compañeros se repitió, todos veían a Lía, fruncían el ceño y negaban a su paso.

Lía los miraba confundida sin entender lo que estaba pasando, al quedar de pie frente al gran comedor lo entendió.

Había cientos de fotos de ella pegadas por las paredes, algunas en las mesas y otras flotando.

En todas con un marcador rojo tenían escrito "Lux", justo en sus ojos, y en la parte de atrás venia su edad, su tipo de sangre y su... su virginidad.

—¡¿Qué es esto?! — Lorcan fue el primero en acercarse a ella con una de las fotos en manos. — ¿Por qué viene eso aquí?

—¿Qué? —jadeo tomando la foto en sus manos negando frenéticamente.

—Lía, las fotos están en todos los pasillos, todos la están viendo. — reclamo Lysander.

—No, lo se. —sus manos comenzaron a temblar provocando que dejara caer la foto.— No sé por qué esa foto tiene eso, no sé por qué salgo yo en la foto.

—Lía...— la voz de Scorpius sonó detrás de ella, maldijo antes de voltear lentamente.

Estaba Scorpius con el ceño fruncido y un par de fotos en sus manos, detrás de él estaba Albus, Aragón y Aria. Los cuatro la miraban fijamente mientras ella trataba de no comenzar a llorar.

—Con razón te vi el otro día en Lux. —murmuro Aria sonriendo.

—¿Qué es Lux? —frunció el ceño mirándolos. — No sé de qué están hablando.

—¿Qué es Lux? —Scorpius bufo negando.

—Todos lo saben Lía. —Albus murmuro. — Es un... prostíbulo.

—No es prostíbulo. —Aria negó empujándolo. — Sabes lo que es Scamander, no te hagas la que no sabes de lo que todos están hablando.

—No. —negó mirando a Scorpius con sus ojos llenos de lágrimas. — No sé de lo que estás hablando, no sé qué significa lo que dicen esas fotos.

—¿De dónde salieron esas fotos? —pregunto Scorpius.

—No lo se. —Lía negó jadeando. —Scorpius tienes que creerme... yo no sé de dónde... — trato de tomar su mano pero la alejo. —Scorpius...

—Estoy muy molesto contigo.

—Tienes que creerme, hablemos de esto yo...

—Ven conmigo. — la tomo del brazo bruscamente logrando que casi de inmediato Lysander y Lorcan lo empujaran.

—No la toques así. —gruño Lysander.

—Es mi novia. —gruño. —Yo se lo que hago con mi novia.

—No vuelvas a tocarla así. —siguió Lorcan. — En tu vida Malfoy.

—Ustedes no me van a decir que hacer o que no hacer, es la vida de su hermana y mía no la suya.

—La llegas a lastimar. —murmuro Lorcan acercándose a él al mismo tiempo que Lysander.

—Y somos capaces de cortarte las...

—No. —Lía se interpuso entre los tres negando. —Solo hablare con Scorpius, no pasa nada, voy por que quiero. —miro a sus hermanos. — Todo estará bien. ¿De acuerdo?

—Mantente cerca. —ordeno Lorcan sin despegar su mirada de Scorpius.

Lía se separó y tomo la mano de Scorpius, Lysander aprovecho para dar un falso paso hacia el frente provocando que Scorpius se sobresaltara provocando una risa de los gemelos.

—Basta. —Lía negó y saco a Scorpius del gran comedor.

—¿Serás honesta conmigo?

—¿No crees que yo no estuve ahí? —pregunto ofendida.

—¿Por qué esa foto tiene la firma de la señora Parkinson?

—Scorpius, ni siquiera sé que es Lux.

—¡Deja de hacerte la maldita mosca muerta!

—No lo hago. —negó. — Scorpius, tienes que creerme, yo no.. yo no se que es ese lugar.

—¿Quieres saber que es ese lugar? —gruño acercándose a ella. — Es donde los malditos pedófilos se van a desquitar con putas inmundas, las tratan como lo que son, y para ellos no son nada mas que eso. —tomo su quijada en una mano. — ¿Fui tu primera vez.. verdad que sí?

—Si. —asintió. — Totalmente, los sabes.

—Mas te vale no mentir. —la soltó de golpe provocando que diera dos pasos hacia atrás por lo brusco que había sido.

Y los pasos de los gemelos no tardaron en hacerse presentes y en un abrir y cerrar de ojos Scorpius ya estaba en el suelo siendo golpeando por ambos hermanos.

El bullicio no tardo en hacerse presente entre todos, trataban de ver como ambos chicos golpeaban una y otra vez a Scorpius, el cual no tenia ni la más mínima oportunidad de defenderse.

—¡Lo van a matar! —Lía trato de acercarse siendo tomada de la mano por su amiga.

—Mejor ni te acerques. —negó.

—¡Que esta pasando aquí! — la voz de la directora se hizo presente y con eso todos tuvieron para correr lejos de los cuatro. — Señores. —miro a los tres que estaban el piso. —Señorita. —miro a Lía.

—Directora. —hizo una mueca y jadeo al ver como levantaba la foto del piso.

Su cara se transformo y si no había estado lo suficientemente molesta cuando llego... ahora lo estaba.

—Los cuatro a mi oficina... ahora. Sus padres van a estar muy... felices de verlos, de eso estoy segura.