𝐇𝐞𝐚𝐯𝐞𝐧𝐥𝐲 | ✔

𝐋𝐈

Últimos capítulos.

S C O R P I U S

Estaba entre sus brazos mientras el cepillaba su cabello, murmuraba palabras bonitas a su oído tratando de reconfortarla, ella era de él, y ni siquiera su padre lo iba a impedir, el plan había sido perfecto, no había falla en él y todo volvería a la normalidad. A su normalidad.

[...]

—¿Se puso celoso? —pregunto recargándose en el respaldo.

—Joder, el viejo estaba completamente rojo, iba a salir humo de sus orejas. —rio.

—Te dije que la pócima había salido perfecta. —sonrió. —No podía evitar enojarse aun que la viera mirando a alguien en una revista. —rieron.

—Me da asco solo de pensarlo. —se removió en su asiento tomando un cigarrillo y encendiéndolo.

—Pues que la rubiecita buen cuerpo lo tiene, tengo que admitirlo. —levanto ambas manos.

—¡Cállate, Bastián!. —se enderezo en su silla. —Te recuerdo que muy pronto será mi esposa respétala pedazo de imbécil. —Bastián levanto ambas manos riendo.

—¿Ella sabe lo que tiene que hacer?. —pregunto Lucius acomodándose en su asiento.

—Lo sabe. —asintió. —La fiesta de compromiso será en dos semanas. Hoy hable con Luna y Rolf, ambos estan muy contentos.

—Te dije que era buena idea usar el imperius en el estúpido de Scamander, él no sabe que hizo ese juramento con Draco, por lo cual no lo puede anular.

—Y así mi papá no puede hacer nada para que Lía sepa.

—Amortenia y Imperius, no cabe duda de que eres Malfoy, más que el cobarde de tu padre. —ambos levantaron las cejas riendo.

—Yo no me entere de la historia de cuando dejaste de ser maricon. —Scorpius bufo.

—Cállate imbécil. —gruño Scorpius. —Los pobres hermanitos idiotas de Lía me lo dijeron.

—¿Ellos como supieron?

—Lía les conto lo que pasaba entre mi padre y ella, y pensaron que mi padre la uso en Lía, además tu hermanita confirmo al decir que el fin de semana se había ido con un chico que nadie sabía quién era y que se quedaría a dormir allá, al parecer el amor de Lía hacia él era "irreal".—rio sin gracia. —La estúpida perra está enamorada de él. —gruño apretando ambos puños.

—Así que corrieron con Scorpius a contarle, y Scorpius vino a mí.

—¿Entonces no te gusta Albus?

—Claro que no. —hizo cara de asco. —Pero tenía que disimular, hacer que todo pareciera... natural, que yo estaba muy enamorado de Albus, que nadie notaba las miradas que mi padre le daba a Lía, creerle que se fue el fin de semana con un tal Damián. Son tan obvios, eran tan obvios que no puedo creer que nadie lo notara y Albus y Samantha se sorprendieran.

—¿Cómo te enteraste?

—Encontré la foto de Lía en el escritorio de mi padre. —lo miro. —Lo demás esta de sobra.

—¿Qué haremos ahora?

—Esperar. —contesto Lucius.

—Hay un pequeño detalle. —hablo Scorpius. —Él la va a buscar, lo sé. De nada va a servir borrarle la memoria a todos, el la va a buscar.

—Lo mandare a Grecia, solo en lo que llega el día, algo se me ocurrirá, no puedo hacer nada hasta que él sepa de su compromiso.

—Tiene que pagar lo que me hizo. —contesto Scorpius.

—Y lo hará. —sonrió. —Créeme que lo hará.

L I A

—¿Ya lo viste Samantha?. —Lía extendió su mano mostrándole el anillo. —Es el de la mamá de Scorpius. —sonrió emocionada. —Saliendo de aquí seré la señora Malfoy. —suspiro enamorada.

—¡Lía es hermoso!. —Maggie aplaudió. — Tu y Scorpius hacen una hermosa pareja.

—¡Verdad!. —Samantha asintió. —Siempre supe que debían estar juntos.

—Señoritas. —Samantha y Maggie rieron mientras Scorpius se inclinaba para dejar un beso en la mejilla de Lía. —Hola princesa.

—Hola Scorp. —sonrió mirándolo. —¿Dónde estabas?

—Fui con mi abuelo. ¿Podemos hablar un segundo?

—Claro. —sonrió.

Scorpius tomo su mano levantándola, entrelazando sus manos caminaron fuera del comedor.

—¿Qué pasa amor?. —pregunto abrazándolo por el cuello.

—¿Qué pasaría si te dejara?. —la mirada de Lía cambio casi instantáneamente.

—Me muero. —negó varias veces. —No podría estar sin ti.

—Buena chica. —sonrió. —Necesito que sigas así si no quieres perderme.

—Es lo que menos quiero. —hizo un puchero bajando su cabeza.

—Mírame a los ojos cuando te hablo. —tomo su mentón conectando su mirada con la de ella. Siempre estarás ahí para complacerme. ¿Verdad?

—Si Scorpius. —asintió.

—Ahora ven. —sonrió. — Tenemos que corregir algo tú y yo.

—¿Qué amor?. —ladeo su cabeza.

—Tengo que quitarte cualquier rastro. — acerco sus labios a su cuello. —¿Eres mía no?

—Toda tuya. —rio mientras sentía los labios de Scorpius en su cuello. —Nos verán, para.

—Vayamos a mi habitación entonces.

—Está bien. —sonrió asintiendo mientras Scorpius tomaba su mano llevándola lejos de ahí.

D R A C O

—¿Qué mierda paso aquí?. —pregunto mirando alrededor.

Había botellas de diferentes tipos de alcohol en el piso, colillas de cigarros por doquier, tenía apariencia que no había ni siquiera comido en días.

—Me das asco. —gruño mientras había las cortinas. Draco casi de inmediato se cubrió los ojos.

—¿Qué haces aquí? —murmuro.

—Buenas noticias. —sonrió sarcástico. —Cerré un negocio pero necesito que tu vayas. —toco su pecho. —No me he sentido muy bien.

—¿Qué tienes?. —se acomodó en su silla. —¿Te sientes mal?

—Un poco, nada importante, necesito que vayas a Dinamarca.

—¿Pero y tú?. —pregunto preocupado. —¿Estarás bien?

—Claro que estaré bien Draco, solo necesito que vayas.

—Está bien padre. —asintió.

—Ahora ve y date un baño, te iras en un par de horas. —Draco asintió levantándose difícilmente de su silla saliendo de la oficina mientras se tambaleaba.

Lucius camino alrededor de la oficina con un gesto de asco entre sus labios, al acercare al escritorio vio la foto, era la puta... buen apodo Lucius, se festejó a el mismo, el muy imbécil estaba sufriendo por amor.

Él se lo advirtió, amar nunca trae nada bueno, Draco era un completo desperdicio para él, aunque Scorpius aún tenía salvación los pondrían en las familias más altas, un Malfoy y una Scamander

Tomo la foto rompiéndola para después quemarla y salir de ahí pensando lo mal que la pasara la pobre niña con todo lo que viene.