𝐇𝐞𝐚𝐯𝐞𝐧𝐥𝐲 | ✔

𝐗𝐗

L I A

Dejo que los meses pasaran, no había tenido contacto con el señor Malfoy lo cual para ella era bueno, inclusive demasiado.

Se había encargado de que no tuviera la oportunidad de aparecer en su habitación, como anteriormente lo había hecho... más de una vez.

Lía caminaba de regreso hasta su habitación, dejo caer la bolsa en la cama una vez adentro y comenzó a desvestirse de camino hacia el baño.

Al estar dentro encontró al señor Malfoy desnudo dentro de su tina, con el espejo volcado lleno de algún tipo de polvo blanco en él.

—¿Que mierd....—agrando los ojos.

—Hola mi amor.—mordió su labio sacudiendo su nariz.

—¿Qué es eso?—señalo el espejo.

—¿Qué crees que es?

—¿Por qué estás en mi habitación?

—¿Por qué tienes habitación propia?—frunció el ceño.

—Que le importa.— frunció el ceño.—¿Qué hace aquí?

—Venía a visitarte.

—Vete.—negó.—No puedes venir aquí, dijiste que dejarías el tema, no quiero que entre alguien y...

—¿Por qué alguien entraría?

—Vete.—repitió.

Al fin y al cabo ambos sabían como iban a terminar, justo como estaban en estos momentos .

El cuerpo de Lía inclinado sosteniéndose del lavabo mientras la embestía de manera agresiva y murmuraba una que otra grosería en forma de alago hacia ella.

Lía puso los ojos en blanco al mismo tiempo que el aferraba sus dedos a su piel sintiendo como la llenaba de tal liquido tan peculiarmente caliente.

—Así es.—murmuro Draco arrullando mientras peinaba con sus dedos su cabello.—No tienes que portarte como una perra conmigo.—jalo su cabello hacia el pegándola en su espalda al mismo tiempo que la tomaba del cuello con su mano libre.—Eres mi creación.—murmuro pasando su nariz por su mejilla.—No trates de ignorar eso.

—Esto no nos esta llevando a ningún lado.

—¿Y por que debería?—frunció el ceño.