𝐗𝐗𝐕𝐈𝐈𝐈

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Todo el cuerpo de Lía vibraba lentamente, sus muslos se apretaban cada vez más mientras ella trataba de mantener la cordura

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Todo el cuerpo de Lía vibraba lentamente, sus muslos se apretaban cada vez más mientras ella trataba de mantener la cordura.

<<Por favor, pare>>

<<Quiero que te corras>>

<<No puedo, por favor, por favor pare, nadie me puede ver así, y usted sabe cómo me dan los espasmos no...>>

Las vibraciones cada vez se hacían más intensas, Lía comenzó a meterse comida a la boca tratando de silenciar sus gemidos.

—Vaya, ¿Te gusta comer no es así? —Odette rio logrando que las mujeres a su alrededor la miraran.

—¿Te sientes mal hermosa? —pregunto Scorpius.

Draco al escuchar eso elevó las vibraciones en el cuerpo de Lía, logrando que cerrara los ojos y negara.

—Me siento bien. —dijo con la voz entrecortada salió casi como un susurro.

—Te vez sonrojada, ¿Segura que no te sientes mal?

—No. —negó varias veces. —Todo bien. —trató de sonreír y termino siendo una mueca. —Me duele un poco el estómago es todo, debe ser hambre. —dijo lo más rápido posible antes de volver a sentir como las vibraciones se elevaban en su cuerpo.

Sus paredes se contraían logrando que sus piernas comenzaran a temblar

<<Mírame cuando te corras>>

<<No haga esto, por favor haré lo que quiera, Scorpius me va a escuchar>>

<<No te importo cuando escucho que me dijiste papi, ¿Qué te hace creer que cambiaré de opinión?>>

Cerró los ojos tomando aire tratando de regularizar su respiración, y cuando menos lo esperaba, miró con sus ojos de ciervo al señor Malfoy, su mirada conectó un par de segundos mientras los fluidos de Lía resbalan por sus piernas, soltó un largo suspiro y el señor Malfoy rio disimuladamente negando.

[...]

Lía salió exhausta de su última clase, por lo cual no tardo en dirigirse a su habitación.

—¡Hermosa! —Scorpius no tardo en acercarse a ella y detenerla.

Lía se giro frunciendo el ceño y aspiro cerca de él.

—¿Qué estabas haciendo?

—¿Por qué? —frunció el ceño.

—Hueles a Albus. —rio.

—Ah. —rio. — Estábamos jugando quidditch

—A Albus no le gusta el quidditch.

—Por eso, le estaba enseñando.

—Uhm. —asintió. — ¿Cómo les fue?

—Bien. Sabes que no es muy bueno entonces se cayo un par de veces.

𝐇𝐞𝐚𝐯𝐞𝐧𝐥𝐲 | ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora