diez

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Lucrecia Bellido.

Al escuchar la voz de mi padre en el primer piso me levanté de golpe, causando que mi frente golpeé con la de JungKook y ambos soltemos un quejido por el dolor. Me levanté de la cama y me coloqué la ropa interior mientras el chico seguía sentado en mi cama, semidesnudo.

⎯ ¡Vístete!⎯ murmuré pasándole la camisa. Él solo metió su pene dentro del pantalón y bóxer para después acercarse a mí y hablar entre susurros sobre mis labios.

⎯ Tendría que ir a saludar a tu padre, ¿Qué impresión tendrá de mí, sino?

⎯ No te atrevas.⎯ lo señalé con mi dedo índice.

Yo sabía que si mi papá veía a JungKook en mi casa, saliendo de mi cuarto, y encima semidesnudo, sacaría el bisturí de su bolsillo de la bata de médico y le arrancaría los ojos. Claro que no quería eso, porque después a mí me seguiría un castigo.

⎯ »Vete o mi padre en serio te echará a patadas, Jeon.⎯ miré la puerta para después mirarlo a él.

⎯ Me iré con una condición.⎯ levantó la comisura de sus labios, formando una sonrisita malvada. Yo con la mirada le exigí que hable, si mi papá no subía a ver por qué no había bajado a saludarlo es por pura suerte.⎯ Dime qué te puso caliente para que te masturbaras.

⎯ ¿Es en serio?

⎯ Sí, responde.

⎯ No lo sé, JungKook, solo tuve ganas.⎯ miré para otro costado, pero su toque en mi nariz me hizo verlo de nuevo.

⎯ Que mentirosa eres. Anda, admite que pensabas que tus dedos eran los míos, que entraban y salían de tu húmedo coñ..-⎯ susurró con la voz ronca cerca de mis labios, me alejé y suspiré profundo.

⎯ Sí, eso imaginaba, me dejaste con las ganas en el baño de la escuela. Ahora vete.

Los pasos de mi padre al igual que su voz se escuchaban cada vez más cerca, preguntando si estaba en casa y si me encontraba bien ya que no le contestaba. No soy de dormir siestas, ni irme sin su permiso, por ende es entendible su preocupación al no contestarle.

JungKook seguía frente a mí, con el torso descubierto mostrando esos dos, cuatro...seis cuadraditos en su abdomen, pudiendo admirar toda la manga de tatuajes en su brazo. También pude ver que tenía una leve marca de garra en su pectoral, seguramente de Delilah, es algo bruta cuando juega con él.

Pero dejando eso de lado, ¡¿Por qué mierda no se mueve?! Si bien mi padre no se caracteriza por ser alguien agresivo, él mismo dijo que si veía a JungKook cerca de mí iba a romperle la cara a golpes, y yo le creo.

⎯ ¿Lu, estás dormida, cielo?⎯ preguntó por mí mi progenitor.

Le tiré la camiseta a JungKook en la cara y él se la quitó para poder verme, cerró la puerta con seguro y nuevamente se acercó a mí, acorralandome en la pared de mi propio cuarto.

⎯ Me iré con la condición que me beses más de una vez.

⎯ ¡¿Estás bromeando?!⎯ pregunté en un susurro molesta.⎯ ¡Mi padre está en el pasillo!

⎯ No me los darás ahora, cuando yo decida.⎯ dijo y estaba a punto de negarme cuando la puerta fue golpeada.⎯ Tú decides, me das besos o ahora mismo abro la puerta y le digo a tu padre lo que hicimos hace no más de diez minutos.

¡Esto es extorsión!

⎯ Bien, bien.⎯ me rendí.⎯ Pero será uno solo.

⎯ Diez.

⎯ Cinco o no hay trato.⎯ negocié y él a regañadientes aceptó.⎯ Ahora escondete, distraeré a mi padre y cuando vuelva no te quiero ver aquí dentro.

i hate you| jjk✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora