23. Peculiar.

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Evan Jones

Se ve tan jodidamente hermosa. ¿Cómo alguien tan mala puede ser tan linda? Llevo tiempo sin saber de ella, y ¡maldita sea! La extraño, su sonrisa, su sarcasmo, sus gemidos en esta misma habitación, todo en ella es jodidamente perfecto. Nunca nadie me había hecho sentir del modo que Karma lo hace, pero me mintió, todo el tiempo ocultó la verdad mientras me veía la cara de payaso.

Me quedo mirándola sin decir nada y ella tampoco sabe qué decir. ¿Por qué tan callada, Karma? Está parada delante de la puerta del baño mirándome fijamente, mientras yo me encuentro sentado en mi cama cómodamente a la espera de alguna palabra.

—¿Qué haces aquí?— pregunta finalmente.

—Creo que yo debería preguntar eso.

Noto cómo me examina cuidadosamente, como si tuviese miedo de decir algo y hacerme enojar. Por otro lado, yo la miro de pies a cabeza y siento cómo enciende algo en mí, pero me recuerdo a mí mismo que es una asesina mentirosa que todo este tiempo estuvo manipulándome y desvío la mirada al suelo.

—Evan, yo...

—Lárgate.

Me sorprendo a mí mismo cuando digo eso. ¿De verdad quiero que se vaya? ¿No quiero escuchar una explicación? Karma no protesta y me dedica una mirada triste antes de salir por la puerta de mi habitación sin siquiera mirar a atrás.

Me levanto de la cama y cierro la puerta detrás de ella, tomo una de las lámparas y la estrello contra la pared para luego dejar escapar un grito de frustración.

No lo entiendo. Estoy de nuevo con Laura, ella es la chica perfecta para mí, es inteligente, guapa e hija de una de las personas más ricas de la ciudad. Karma solo me manipuló, me mintió, todo el tiempo que estuvimos juntos fue solo un juego para ella. ¿Entonces por qué me sigue afectando tanto verla? ¿Por qué no puedo olvidarla de una puta vez? ¿Por qué siento que estoy en un callejón sin salida?

Me tiro en el suelo y pego mi espalda en la puerta de mi habitación. Tomo el teléfono que está en el suelo y marco el número de lo que va a significar un cambio en mi vida. Si a ella no le afecta nada, a mí tampoco me afectará. ¿Quieres jugar, Karma Blame? Entonces juguemos.

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Viernes.

Entro en el comedor de la Universidad y todas las personas se me quedan mirando, siento murmuros a mi alrededor, pero los ignoro completamente, sé exactamente a qué se deben, y sí, es a mi nuevo look.

Traigo puesto un pantalón negro junto con un pullover blanco, encima me he puesto una chaqueta y en mis pies están puestas unas botas negras que me dan un estilo de fuckboy, y eso es exactamente lo que quiero, pero no me miran así por eso, sino por el verdadero cambio.

Me siento en la mesa con los chicos y todos me miran sorprendidos, pero no dicen nada, siento a mi novia protestar, pero la ignoro y desvío la mirada hacia la mesa del fondo mientras observo cómo los hermanos Blame me están mirando anonadados, Hell evidentemente divertido, Destiny asombrada, pero con una sonrisa en su rostro y finalmente Karma, quien parece realmente molesta.

¿No te gustó mi apariencia, copito?

Karma Blame

¿Es en serio? Me levanto de la mesa furiosa y me dirijo hacia donde está el que alguna vez miré con amor. Luna se levanta y se mete en mi camino, pero yo la aparto, llego a la mesa donde se encuentran mis antiguos amigos, pero los ignoro y centro mi atención en Evan, quien tiene uno de sus brazos alrededor de los hombros de su novia.

Amor Apocalyptico [✔] +18 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora