32. Simplemente insuficiente.

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Tres años antes...

Primavera.

Para mí, esta es la estación más estúpida de todas. Se supone que es una época linda y de mucho amor, pero la realidad es que es solo una excusa de los humanos para sentirse especiales. Todas las parejas van al parque a tener un paseo romántico, los chicos les regalan flores a las chicas y les juran amor eterno.

Bullshit.

Esa tarde llego un poco más tarde a casa debido a un castigo impuesto por mi profesora de Matemática, mis notas son excelentes, pero según ella yo soy una rebelde consentida que necesita educación. ¡Qué patética! Subo a mi habitación y al abrir la puerta encuentro a Luna sentada en mi ventana. Dejo la mochila a un lado y me siento en mi cama.

—Hola— la saludo.

—Hola.

Algo anda mal, la voz de Luna está rara. Me levanto de la cama y me coloco a su lado, tomo su cara entre mis manos, pero ella las aparta y confirmo mis sospechas. Los ojos de Lu están enrojecidos e hinchados, señal clara de que ha estado llorando por un buen tiempo.

Últimamente la he visto esconderse en el baño por mucho tiempo, así que sé que esto tiene algo que ver con su actitud distante.

—Luna— le digo suavemente—. ¿Qué ha pasado?

—No es nada— dice casi susurrando.

—Puedes confiar en mí.

Luna niega con la cabeza.

—Te conozco, le harás daño.

«Le harás daño»

Me tenso ante sus palabras. Sea lo que sea que la ha hecho llorar tiene que ver con alguien y creo saber quién. Suspiro y tomo su barbilla obligándola a mirarme a los ojos nuevamente.

—Esto es por él, ¿verdad?— le pregunto y ella asiente.

Luna ha estado saliendo con el capitán del equipo de football del instituto, que en mi opinión, es un idiota. Se llama Ernesto y es un año mayor que ella. ¿Qué puedo decir? Mi hermana no sabe escoger bien a sus novios, pero este chico es diferente a los demás, hay algo en sus ojos que no me gusta, algo que todavía no he descifrado.

—Él era tan bueno, tan romántico...— empieza a decir ella y yo solo le presto atención en silencio—. Estábamos viendo una película en su casa, una cosa llevó a la otra y...—su voz se raja—, tuvimos sexo...

Luna era virgen y siempre ha creído en su príncipe azul, así que esto es muy importante para ella.

—...pensé que después de eso estaríamos más unidos que nunca, como el amor verdadero en las películas— es que solo son eso, Luna, películas—, pero él... nos grabó haciéndolo y ahora quiere que haga todo lo que él quiere y si no lo hago le enseñará el vídeo a toda la escuela.

Hijo de puta.

Me levanto de la cama furiosa, dispuesta a encontrarlo y hacerle pagar por esto, pero Luna me toma de la mano y me detiene.

—No lo hagas— dice y yo la fulmino con la mirada—. No lo hagas, Karma, yo lo quiero y lo conozco, sé que todo esto pasará y volveremos a ser la pareja de siempre.

Quiero gritarle que es una estúpida, que es obvio que Ernesto solo ha jugado con ella, que esto es lo que él quería desde el principio, pero me contengo. Luna no necesita eso ahora, ella necesita un abrazo, que su hermana la apoye, que le diga que todo va a salir bien y eso hago, pero una semana después la encuentro llorando otra vez en su habitación.

Amor Apocalyptico [✔] +18 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora