Cuando salgo, estoy un poco más tranquilo. Como le dije a Emilio, Elena no nos arruinará la noche, porque puede que eso es lo que estaba buscando al hablar conmigo. Emilio se ha alejado un poco y habla por teléfono, apartado de todos.
Me voy acercando, por lo que puedo oír lo que dice.
- ¿Por qué cambiaste de opinión? Creí que habíamos acordado algo. Bien, pues déjalo en paz – dice muy seco – Sabes muy bien que esta es la primera relación que he tenido en toda mi vida, y no pienso dejar que tú interfieras. – Se calla y escucha - Me importa muy poco lo que pienses o el motivo por el cual lo haces. Hablo en serio, déjalo... en... paz.
Está tan molesto que ni siquiera se ha dado cuenta de mi presencia, pero noto que su espalda está tensa, y su aroma se encuentra un poco amargo.
- Es mi vida, no la tuya. Quiero a Joaquín en mi vida, y tú tienes que respetar eso. No te acerques a él, no le hables y no lo vuelvas a amenazar – gruñe y vuelve a quedarse callado durante un instante – No, tú no lo conoces. Me importa un carajo tus preocupaciones – vuelve a escuchar – Sí, tienes razón, no sé de qué sería capaz y puede que nunca me hayas visto de esta forma por algo...
Voltea y su mirada se encuentra con la mía.
- Tengo que irme. Buenas noches.
Apaga su celular y lo guarda.
Juego con mis dedos.
- ¿Cómo está la vieja amiga? – pregunto con inocencia.
- De mal humor, supongo. La verdad ahora no me importa – responde antes de soltar un suspiro, creo que para calmarse - ¿Deseas volver a bailar? ¿O quieres irte? – le echa un vistazo a su reloj – Los fuegos artificiales empiezan dentro de un rato.
- Me encantan los fuegos artificiales – digo con una pequeña sonrisa.
- Entonces nos quedaremos a verlos. – Me pasa un brazo alrededor del hombro y me atrae hacia él – No dejes que ella se interponga, yo no lo permitiré.
Agarro su mano, entrelazando nuestros dedos y suspiro.
- Lo sé... ¿hablaremos de lo que le dijiste? – cuestiono.
Pasa saliva con fuerza.
- ¿A qué te refieres? – pregunta, como si no supiera de lo que estoy hablando.
- Me refiero a que me quieres en tu vida... Que te importan muy poco sus preocupaciones y todo lo demás que le dijiste.
- Ah – se limita a decir.
¿Es un poquito frustrante el que no quiera hablar? Sí, si lo es.
¿Puedo cambiar la situación o forzarlo a hacerlo? No, no puedo ni quiero, porque no quiero forzarlo a hacer algo que él no puede hacer con normalidad.
Acaricio el dorso de su mano.
- Me imagino que no quieres hablar del tema, ¿cierto? – digo, con mucha tranquilidad.
- Es que es... complicado. Es una buena amiga, compartimos una historia, siento que me ayudo en su momento... Pero no quiero que te lastime.
Tuerce la boca, parece incomodo por la situación.
- Si te soy sincero, no creo que te haya ayudado como tú crees o quieres creer; sin embargo, este no es el momento ni el lugar para hablarlo – confieso – Ya sabes lo que pienso de ella, aunque tú sigas creyendo que es alguien importante en tu vida.
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Mi alfa y sus sombras más oscuras (Adaptación)
FanfictionJoaquín Bondoni llegó a la vida de Emilio Marcos para darle un giro de 180°, poniendo su mundo de cabeza y todo lo que creyó que no necesitaba, ahora necesita. Emilio sigue teniendo demasiadas sombras, demasiados traumas y demasiadas cicatrices que...