Eres mi gran amor - Caché

Salida

Pov Poché:

Tres meses después de la noticia que le dio Calle a Vale nos puso un poco decaída, pero no podria notarse, no frente a Ale.

Habian pasado tres meses en los cuales fueron bonitos y feos días, de los cuales agradezco en los que estaba Salomón disfrutando conmigo y con Calle.

Sin dudarlo llegamos a una conclusión de salir de paseo por unos días, en los cuales se unirían unos amigos.

La mañana siguiente....

Hoy saldriamos todos, como una familia.

Vale ya se habia cambiado, y por lo que tenía entendido era que Calle y Salomón también estaban listos.

Queríamos ir hacia un campo o un lugar donde estemos bien con el ambiente.

Por eso mismo le pedí a mi padre si me podría prestar las llaves de la casa de campo que quedaba a unas hora de donde estábamos.

Viaje quienes estarán mi familia: Vale y yo.

Mi padre se dice que tenía trabajo y Ale....,no es bueno hablar de Calle con Ale,por eso que no quería ir.

Obvio le hablamos del tema, le preguntamos si quería ir, pero se negó.

Por otro lado iban algunos de parte de Calle: Laura, Lucía, Peter, el esposo de Lucía, Salomón y algunos amigos en común.

Con las mochilas ya listas, salimos de mi casa hasta la casa de los Calle.

Todos estaban ahí porque quedamos en encontrarnos dentro de la casa de los Calle.

Ya habíamos tocado el timbre, pero no abrían, algo que terminamos cansadas por la demora.

Después de 10 minutos se abrió la puerta.

- ¿por qué se desesperan? - preguntó Calle al vernos en su puerta - llamaré al electricistas para ver si no me malograron el timbre - los ojos de Calle me miraron de arriba a abajo.

- estamos hace como 10 minutos ahí paradas, ¿por qué no abrias la puerta? - ella río y se dirigió a las escaleras.

- si le dejas de mirar la cola sería mejor, hermanita - habló Vale cuando vi como Calle desaparecía por las escaleras.

Negué y me fui hacia el sillón.

Que fue mala idea porque me vino a la mente las horas que pase con Calle. Desnudas.

Algo de tristeza con un poco de excitación, tristeza porque sabía que en algún momento esto se acabaría, no habría nada de jueguitos y me terminaría quedando en California....eso estaba pensado.

Excitación al recordar las horas que estuvimos juntas, con ganas de demostrarnos que no era suficiente lo que pasamos, queríamos más y más.

El deseo en mí no se acabaría se ella existe.

Esos pensamientos se desaparecieron cuando me enteré que Salomón era mi hijo, que tendría que hablarlo con Ale.