37.- Natasha Romanoff.

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Después de algunos días, Alena cada vez se sentía más agotada, más lejana de James. Este,
Por otro lado, no paraba de pensar en las mil formas de poder pedirle a Alena que vuelvan, pero cada vez que eso ocurre, él lo arruina peor.

karpov solicitó una reunión con todo el equipo, así que el panorama de ese día no sería muy alentador, cada vez que ocurrían estas reuniones, algo malo estaba por venir.

Grigori fue a buscar a Alena, está cada vez se veía más apagada y desinteresada de la vida, Grigori intentaba distraerla, hablarle, hacerla reír, etc. Pero cada día era más difícil para ella continuar con esa vida.

— ¿Vamos?...— Le dijo con entusiasmo. Alena sonrió y le tomó el brazo a Grigori.

Llegaron a la sala de reuniones, karpov aún no aparecía, tampoco James, se sentaron y Grigori le tomó la mano.
— ¿cómo te sientes?—
Alena le afirmó con fuerza la mano y se apoyó en su hombro, suspiro largo y doloroso, para luego responder.
— Igual que todos los días...—

En eso, aparece Nika y Karpov. Grigori miró con el ceño fruncido y movió su hombro para que Alena se fijara en lo que estaba ocurriendo.

Ambos quedaron sorprendidos al ver que Nika conversaba con Karpov como grandes amigos.
—.. Esto no me gusta...— murmuró Alena.
— A mi tampoco...— respondió Grigori.

En eso aparece James y Malik. Grigori y Alena dijeron al mismo tiempo.
— Algo ocurre...—

Karpov comenzó a hablar sobre los nuevos entrenos y la nueva misión que se venía, advertía que ésta iba a ser más peligrosa y que se debía ir en equipos más grandes.

Alena apoyada en el hombro de Grigori, sentados al fondo de la pared derecha y James sentado en  primera fila en la pared izquierda, viendo como la chica se acurrucaba en el hombro de Grigori tomados de la mano. James notó cómo se acariciaban la mano y eso lo hizo sudar de rabia . Cada día sentía más odio y celos hacia quien fue su mejor amigos en su momento.

Después de varias horas hablando sobre el nuevo proyecto de la nueva misión que se les encomendaría a los soldados, informaron que la misión era asesinar a un ingeniero nuclear , pero que este iría muy bien escoltado y no por cualquier soldado, iría escoltado por nada más y nada menos que Black Widow, Natasha Romanoff.

Cuando Karpov dijo el nombre de la mujer, Varios se tensaron, pues ésta fue parte de Hydra y era la mejor asesina, pero siempre trabajó como doble agente, así que siempre andaba en un bando y otro.

Karpov y Malik Sabían que el nivel y la calidad de pelea de Natasha no era como la de un simple soldado, tenía habilidades increíbles, por eso se le llamaba "Black Widow".

Todos tomaron atención a las imágenes que Karpov mostraba del ingeniero y de Natasha.
La única que no estaba atenta a nada, era Alena, quien dormía en el hombro de Grigori. James estaba furioso y al mismo tiempo atento a lo que Karpov hablaba, pues era importante, él debía ir a esa misión.

De repente Karpov habló fuerte.
— Al parecer a la Señorita Yatkina ya no le interesa ser parte de las misiones...— Grigori la movió rápidamente y esta se sentó firme.

Karpov se acercó lento, todos observaron y Alena se achicó en su asiento.
— Lo-lo siento señor...—
— ... ¿qué?... ¿ no haz podido dormir ?— Alena miró de reojo a a James quien estaba frente a ella y respondió.
— No mucho señor...—
Karpov bajó a la altura del rostro de Alena y le susurró.
— No es mi problema... —
— A TRABAJAR— dijo en voz alta volviendo a su puesto.

James miró de lejos a Alena y ésta murmuraba con Grigori, negaba con su cabeza y miraba el piso.

Después de bastante rato Karpov dio un último aviso, el más devastador para Alena.
— Las parejas de psicólogo y Soldado quedarán de la siguiente manera...—
James y Alena se tensaron y al mismo tiempo intercambiaron miradas, pero nada más.

La Psicóloga de El Soldado del Invierno Donde viven las historias. Descúbrelo ahora