Avanzó temblando de emocion por la espiral del cielo. Murmuró tu nombre solo para mí, camino entre cadáveres como si no estuvieran allí.
Por favor llama y repite mi nombre como hiciste aquel día.
Te lo ruego solo di mi nombre, por favor una vez má...
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La ceremonia continuó con normalidad, silencio y respeto, con las otras divisiones militares presentes adornando la gran sala real con los héroes de la muralla María inclinados frente a la reina Historia mientras alabanzas y la palabras eran soltadas por esta en memoria de los caídos.
Galatea entre Eren y Levi mientras esperaba pacientemente por el final del evento recordando a su padre y esperando poder honrar su memoria dándose cuenta que no hubo mayor muestra de amor que dejarlo morir.
En aquellos libros estaba la respuesta que buscaban, pero no era más alentadora que las teorías que formaban durante la noche antes de dormir, si el mundo más allá existía entonces no era mejor que su propio infierno.
No era un mundo puro ni tampoco limpio en donde sólo hay lealtad y amor, la cruel verdad de Marley y el trato a los que suponen ser del pueblo de Ymir.
El deplorable estado del mundo y la humanidad sólo iban a corromperlo aún más, había muerto soñando con lo que había detrás del muro y al final Galatea cargaría no sólo con los cadáveres de los caídos si no con la verdad que tan inocentemente quería saber.
Su padre había elegido una vida complicada, trágica y fue capaz de deshumanizarse para cumplir su objetivo y honrar a su propio padre, al final ambos no eran distintos.
Pero aun que todavía Galatea no era capaz de cargar con la pesada montaña de cadáveres de su padre le daría sentido a las muertes que había vivido desde la infancia, no quería ser un demonio, no aún.
Historia se posó frente a ella colocándole aquella insignia verde con las alas de la libertad mientras ofrecía una sonrisa casi imperceptible y, como con el resto, ofreciendo el dorso de su mano para que fuera besada.
Cuando fue el turno de Eren todo fue diferente, solo aquellos que estaban a su lado e Historia podrían ver el tipo de expresión que tenía en el rostro.
- ¿Eren? - llamó en un susurro dándose cuenta casi de inmediato del terror que causaba esa expresión el el joven.
Cuando la rubia miró a Galatea de la misma forma esta se sorprendió ya que no entendía lo que les había pasado a ambos en un momento así y tampoco estaban en posición de preguntar.
Pero algo no le había gustado de las expresiones de sus amigos en ese momento.
Al terminar no logró hablar con Historia y Eren parecía evitar el tema diciendo que no era nada y que simplemente lo había olvidado, pero la única que no era convencida por sus palabras era Galatea, más cuando se acercó al ojiverde y este la miró nervioso.
Durante la cena dejaba escapar suspiros, se sentía fuera de lugar de una forma en la que sentirá ver más allá de los que pasaba, las risas y las conversaciones que se entablaban en la mesa llena de adultos en la que estaba se sentía casi como un sueño.
